En México, alrededor de 9.1 millones de personas mayores de 18 años tienen algún tipo de crédito informal vigente y, de estos, 3.5 millones lo usaron para comprar comida, gastos personales o para pagar servicios como electricidad, agua, entre otros.
Los créditos informales abarcan desde los préstamos familiares, hasta los pedidos a los agiotistas fuera de las instituciones como la banca múltiple. Según la Encuesta Nacional sobre Finanzas de los Hogares 2019, el grueso de estas deudas va para el pago de alimentos.
A pesar de ello, del total de deudores estimados por la encuesta, por la vía informal, 1.6 millones destinan los recursos a los gastos de salud. Este comportamiento es mayormente observado entre las mujeres que entre los hombres.
La educación también es importante, por eso, más de un millón de personas usan los préstamos informales para pagar los gastos educativos. Y de este total, el 60% son mujeres.
Deudas
Un total de 13.4 millones de personas adultas adquirieron deudas, ya sea, a través de medios informales o del sistema financiero y el principal uso que le dieron a esos recursos fue satisfacer necesidades personales básicas y de alimentación.
La Encuesta Nacional sobre Finanzas de los Hogares del INEGI y Banxico mostró que, del anterior total, 9.1 millones de personas pidieron préstamos informales a familiares, cajas de ahorro, empeño o prestamistas y de ellos, 3.5 millones (38.3% del total) usaron esos recursos para gastos de comida, personales o pago de servicios, siendo el concepto de mayor frecuencia reportado por las personas.
Por su parte, 4.3 millones de adultos acudieron al sistema financiero para un préstamo de nómina o personal, de los cuales 25% lo usó para gastos de comida, personales y de servicios; seguido de ampliar o remodelar su casa (19.4%) y pagar deudas distintas a negocios (15.6%).
Los expertos en finanzas personas recomiendan un uso prudente del crédito, en el cual se debería usar en actividades o instrumentos que generen ingresos y permitan pagarlo, como puede ser un negocio o bienes de capital.
Por tanto, asumir gastos de corto plazo con crédito, como lo es pagar la alimentación o los gastos generales del hogar, no es una práctica financiera recomendada porque conduce al sobreendeudamiento de los hogares.
Asimismo, en la encuesta del INEGI y del Banxico se muestra que los hogares reportaron que ante el sistema financiero por los créditos de nómina y/o personales hay 136 mil 185 millones de pesos, mientras que en los créditos informales el monto de pasivos es de 249 mil 875 millones.
En este mismo sentido la Alianza Nacional de Pequeños Comerciantes (ANPEC) dio a conocer los resultados de su 16a. Encuesta: Hábitos de consumo y pobreza en donde reveló el cambio de hábitos de consumo en las distintas categorías ya que han girado a compras diarias y necesarias, de medios kilos, por pieza, genéricas y a granel.
La manera de consumir las distintas categorías de mercado, por la caída del poder adquisitivo ha girado a la siguiente manera: tortilla, por medios kilos, huevos: por pieza, leche: por litro, pan en barra grande, embutido/quesos: menos de medio kilo, aceite: por litro, arroz: por medio kilo, frijol por medio kilo, azúcar por medio kilo, tomate por pieza, al igual que cebolla, aguacate y papa, las carnes por kilo (cuando se logra consumir).
cj