El escenario laboral en México es de contrastes tras la llegada del coronavirus, de acuerdo a la Encuesta Nacional de Ocupación y Empleo (ENOE) durante el primer trimestre de 2020, el mercado laboral tenía menos trabajadores informales, pero más personas en la calle cazando un mejor o nuevo empleo, por necesidad.
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Según el reporte del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi), donde se encuentran cifras de marzo cuando iniciaba la Jornada de Sana Distancia y el cierre de actividades laborales, la tasa de informalidad, según la ENOE, se ubicó en 56 por ciento de la población ocupada -cifra desestacionalizada- y a pesar de que este porcentaje equivale a 30.9 millones de personas, la proporción está en un nivel histórico bajo. Por otra parte, la desocupación tuvo un ligero aumento de 0.1 puntos porcentuales en un año, para situarse en 3.5 por ciento.
De acuerdo con Carlos Ramírez, director de Desarrollo de Negocios de Integralia Consultores, la tasa de desempleo es una de las buenas noticias de cómo se encontraba el mercado laboral en México antes de la llega del covid-19; sin embargo, hay otros indicadores que muestran las condiciones reales del empleo.
Para José Luis de la Cruz, director del Instituto para el Desarrollo Industrial y el Crecimiento Económico (Idic) la estabilidad en la desocupación es un aspecto positivo, pero el incremento en la subocupación refleja que uno de los grandes retos no sólo es crear empleos, sino tener uno de buena calidad.
Armando Leñero, presidente del Centro de Estudios para el Empleo Formal (CEEF), resalta que la desocupación se ha mantenido a raya, pero el incremento en la subocupación es importante.
La subocupación según la ENOE fue de 8.7 por ciento de la población ocupada, esto se traduce en que 4.8 millones de personas están buscando un empleo complementario o un nuevo trabajo porque tienen la necesidad de trabajar más horas.
Para el director de Integralia, Carlos Ramírez, las pocas oportunidades que ofrece el mercado laboral son la respuesta al incremento en la subocupación.
Mientras que para Idic el incremento de la subocupación responde a la precarización del mercado laboral.
Con información de El Economista
(Karla Alva)