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Las facturas que pueden ser un problema con el SAT

la frecuente emisión de facturas apócrifas ha sido una mala práctica, pero podría ocasionar serios problemas con la autoridad fiscal, incluso hasta la cárcel

Escrito en DINERO el

Una vez que nos inscribimos en el Registro Federal de Contribuyentes (RFC), nos convertimos en proveedores o consumidores de bienes o servicios. Esto se traduce en una acción concreta: la emisión o recepción de facturas electrónicas, que no es otra cosa que el pulso de nuestra actividad financiera, lo cual implica una serie de movimientos en nuestros ingresos y egresos.

 

Sin embargo una mala práctica común son las facturas apócrifas cuyo objetivo de este fraude es demostrar que se paga mucho por un servicio o producto, no obstante facturamos poco.

 

¿Factura falsa?

 

Una factura se considera falsa porque, si bien cuenta con los elementos formales y autorizados por el SAT, ampara operaciones que nunca se llevaron a cabo.

 

Una factura falsa es igual a cualquier Comprobante Digital por Internet (CFDI). Cuenta con todos los elementos formales y autorizados de todas las facturas. Lo que la hace falsa, de acuerdo con el SAT, es su contenido; el cual, en el inicio se presume verdadero y por lo mismo las transacciones bajo esta situación consiguen tener efectos fiscales. Sin embargo, hasta que la autoridad fiscal revisa los CFDI es cuando detecta que la operación es simulada y que no existe.

 

Factura falsa / factura invalida 

Es importante diferenciar que no es lo mismo una factura apócrifa que un comprobante inválido. Este último caso puede ser ocasionado por alguna falla en la captura de datos, lo cual ocurre con mucha frecuencia, por ejemplo, cuando hay algún error en el RFC.

 

Si crees que estás ante una factura apócrifa, lo mejor es que verifiques su validez antes de realizar una denuncia. Puedes usar la opción de “Verificar facturas” que se encuentra incorporada en el sistema del SAT. También puedes hablar con quien emitió la factura en cuestión para que subsane el error.

Cuando se tratan de errores humanos sin malas intenciones, la solución se resume en establecer comunicación con la persona responsable.

 

La intención detrás de la factura falsa y la factura inválida es distinta. Es por ello que, de acuerdo a la gravedad de la falta, el SAT determinará qué consecuencias tomar contra las personas involucradas.

 

¿Cómo verificar una factura en el SAT?

Como medida de prevención y para evitar la evasiva fiscal, el SAT puso a disposición de las y los contribuyentes una herramienta para corroborar que las facturas electrónicas que reciben no sean facturas apócrifas o falsas. Si sospechas que recibiste un comprobante fiscal falso y quieres salir de dudas de una vez por todas, deberás revisar la factura a través de la herramienta disponible en el portal del SAT.

 

Para que puedas verificar tu factura, requieres algunos datos como tu RFC y el del emisor del CFDI, además de su número de folio. Luego de ingresarlos verás que, si el comprobante es válido, podrás imprimir tu factura; si no lo es, el comprobante aparecerá como no registrado.

 

También puede suceder que una factura no esté registrada porque aún no ha “impactado” en el sistema. En este caso, lo mejor es esperar 72 horas y revisar de nueva cuenta si está activa.

 

¿Por qué debería evitar una factura apócrifa?

 

Antes de producir o comprar una factura apócrifa, es conveniente pensarlo dos veces, ya que la sanción no es sólo económica: también prevé penas en la cárcel de un mínimo de tres meses de prisión. Y, por si fuera poco, en el fraude no sólo está involucrado quien emitió la factura falsificada, sino también quien pagó por ella.

 

 

 

 

 

 

 

 

cj