De unos años a la fecha, los usuarios han migrado a las nuevas plataformas de streaming, como Netfllix, Amazon Prime, Disney+, por ejemplo, que ofrecen a las audiencias nuevas opciones para consumir contenidos; principalmente, contenidos nuevos, como películas y series, de hecho, son millones los espectadores en todo el mundo que año a año esperan ansiosos el estreno de la nueva temporada o el estreno de una anticipada serie.
El éxito de estas plataformas radica en la producción e innovación de contenidos. Muchas personas han elegido contenidos extranjeros por encima de los nacionales; sin embargo, la iniciativa de reforma a la ley de cinematografía que pretende imponer una cuota de 15% de contenido nacional afectaría principalmente a los televidentes.
De acuerdo con Deloitte, en los últimos diez años, ha habido un descenso en el consumo de televisión tanto abierta como de paga. Dio como referencia datos de Nielsen Ibope, que de 2009 a 2019, el tiempo diario para ver televisión abierta decreció de 3 horas con 16 minutos a 2 horas con 33 minutos, mientras la televisión de paga, en 2018, a pesar de registrar un crecimiento de 36 minutos a 1 hora con 5 minutos, presentó un descenso de 21%.
Si la gente está dejando de mirar TV, entonces, ¿hacia dónde está migrando la audiencia? Una de las respuestas podría estar en el internet. En los últimos años, hemos observado que el consumo de contenidos por internet está en aumento.
De acuerdo con Raúl Katz, director de Investigación de Estrategia de Negocios en el Columbia Institute, la cuota de catálogos no beneficia a ninguno de los participantes de la industria audiovisual: consumidores, productores y plataformas; sino únicamente titular de los derechos de obras audiovisuales de producción nacional que podrían ser licenciadas nuevamente.
Las plataformas como Netflix, Amazon, HBO o plataformas locales que producen o licencian contenidos, verán sus costos incrementados y en algún momento ese costo lo trasladaran al usuario.
BENEFICIO ESPECÍFICO
La obligación de que las plataformas digitales, como Netflix, Amazon Prime, Disney+ o Blim reserven el 15% de su catálogo para producciones cinematográficas y audiovisuales nacionales traerá como principal consecuencia el fortalecimiento de Televisa, coincidieron expertos.
En 2019, Televisa produjo más de 88 mil horas de programación. Adicionalmente, es dueña o tiene los derechos de distribución de 456 filmes en español, de acuerdo con Centro-i.
Al mismo tiempo, la principal ventana de acceso a los contenidos audiovisuales en el hogar han sido la televisión abierta y de paga, concentradas también por Televisa lo que ha generado una gran ventaja para la distribución propia de sus contenidos.
En el marco del foro, ¿Cómo impulsar los contenidos audiovisuales independientes en el nuevo entorno digital?, Miguel Flores, experto en temas de competencia dijo que la intervención gubernamental no tiene análisis profundo de la situación del mercado y podría generar distorsiones.
Por su parte, Sissi de la Peña, gerente de comercio digital y organismos internacionales, dijo que esta iniciativa si bien los objetivos que plantea son para fomentar el desarrollo de la industria, la cuota del 15% de contenido nacional en OTT, tendrá un impacto negativo en la industria y en los usuarios. Viola los compromisos de México en el T-MEC, la regulación propuesta inhibe la competencia y a reducir los catálogos.
De acuerdo con Centro-i, las llamadas OTT audiovisuales, como Netflix, Amazon Prime, Disney+ o Blim ya no compiten con catálogos de películas y series viejas, como en un inicio, sino que ahora ofrecen producciones propias de elevada calidad, que incluso son premiadas en festivales de cine en todo el mundo.
Dio como referencia que, en 2019 Blim TV, una de las plataformas mexicanas con mayor oferta de contenido local, y Prime Video tenían casi la misma cantidad de películas mexicanas en su catálogo, 231 y 224, respectivamente. Sin embargo, las 231 películas mexicanas representaban el 95% del catálogo de películas Blim y solo el 5% del catálogo de Prime Video.
Entonces, para cumplir con la cuota del 15%, Prime TV tendría que triplicar su repertorio de contenido mexicano y solo Televisa tendría la capacidad para proveer el contenido nacional necesario a Prime TV y a las otras plataformas digitales para cumplir con la obligación propuesta.
En febrero de 2021, el Senador Ricardo Monreal presentó una iniciativa para abrogar la Ley Federal de Cinematografía y expedir una nueva Ley Federal de Cinematografía y el Audiovisual.
En el caso particular de la distribución, exhibición y comercialización de los contenidos por parte de las plataformas digitales, se propone que éstas reserven 15% de su catálogo para obras cinematográficas y audiovisuales nacionales, que no hayan sido producidas hace más de 25 años.
María Elena Estavillo, directora del Centro-i destacó que “hemos tenido mercados tradicionalmente concentrados y que han necesitado reglas específicas para abrir puertas a los creadores, a los productores que generalmente están al margen del mercado”. El reto es que haya condiciones de competencia que equilibren la forma de exhibición.
Además, esta iniciativa podría resultar violatoria del T-MEC. El capítulo de comercio digital contempla que no se otorgará un trato desfavorable a un producto digital creado, producido, publicado, contratado, comisionado o puesto a disposición por primera vez en condiciones comerciales en el territorio de otro país miembro del T-MEC.
Al respecto, Miguel Flores, abogado especialista en temas de competencia dijo que "no podría aplicarse el trato discriminatorio a Estados Unidos ni a Canadá, pero también violaría el capítulo de inversión y el de servicios, probablemente el OMC. Es un problema jurídico internacional grave”.
MALA SEÑAL
De acuerdo con datos del Centro-i, de 2018 a 2019, Prime aumentó su contenido original producido en México en 68 % . En 2020, Netflix invirtió 200 millones de dólares para producir contenido original en nuestro país. Para 2021 anunció que la inversión ascendería a 300 millones de dólares para producir 51 series . De hecho, México es uno de los cinco países del mundo donde Netflix opera un estudio de producción para contenido regional. Disney+ informó que realizará 21 producciones este año en México . Y HBO Max, aún antes de ser lanzada, ya realiza producciones en territorio nacional.
Frente a esta realidad que ha traído inversiones, diversidad y competencia a los mercados locales de producción de contenidos audiovisuales, la iniciativa levanta una barrera significativa para que el mercado continúe beneficiándose de estos recursos, con lo que se desalienta la creación de contenido en lenguas locales, con temáticas nacionales o regionales, hecho con talento nacional, en territorio mexicano y producido por las plataformas digitales extranjeras que ofrecen servicios en México.
cj