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Crisis y clima de negocios, “gota que derramó el vaso” para JPMorgan

Incertidumbre de inversión y políticas públicas sí preocupan a bancos extranjeros...y otras empresas

Escrito en DINERO el

Las políticas públicas implementadas por el gobierno mantienen “enrarecido” el clima de negocios; sin embargo, éste es sólo uno de los factores determinantes para la salida de capitales internacionales, pues también se suma la emergencia sanitaria, además, los inversionistas permanentemente analizan donde son es más redituable su capital y hasta por temas de competencia es que se hace inviable la estancia de algunas empresas en el país.

Manuel Díaz Mondragón, presidente del Instituto de Asesoría en Finanzas Internacionales explicó que el cierre de negocios de la banca privada de JPMorgan en México y la salida de las oficinas de representación del Bank of Montreal de Canadá y el israelí Mizrahi Tefahot Bank, Ltd: “Es una combinación clara de la incertidumbre y de la reducción significativa en las rentabilidades”.

Lo que hacen los inversionistas es que, si la economía en donde están presentes no es suficientemente sólida o estable para dar el siguiente paso que sería establecer una sucursal es cuando salen del país, y fue exactamente lo que ocurrió con dichas oficinas de representación en México.

La relación entre gobiernos como México, Brasil, y Estados Unidos establecen un conflicto importante entre las grandes empresas, pero aunado a esto está la crisis de la salud en todo el mundo que ha obligado a las empresas a readecuar estrategias de negocios.

Jorge Sánchez, investigador de la Fundación de Estudios Financiero comentó que la decisión de JP Morgan de cerrar su negocio de banca privada en México y de otras firmas extranjeras no es de un día para otro. Es un asunto que se va gestando con el tiempo y aunque sí influyen situaciones como la contra reforma energética, por ejemplo, éstas son un factor más.

Sin embargo, no quiere decir que se deba esperar un efecto dominó. Y tampoco que decisiones como la de JPMorgan afecten a la industria de la banca comercial para el común de los usuarios, porque hay más empresas que proveen los servicios, y el negocio que cierra la estadounidense está enfocado en un nicho.

Díaz Mondragón, quien también es coautor del libro: La Historia de la Banca Extranjera, dijo: “Algunas (empresas) ha tenido que cerrar, otras adecuar manejo de movimientos de costos, las más han decidido cambiar de rumbo o estrategia. En la industria de la banca global se trata de algo común en tiempos de crisis, la industria bancaria es un mercado oligopólico y los dueños de las grandes firmas buscan donde haya más rentabilidad”.

Con la salida JPMorgan, “hay que pensar que ese segmento de atención es solo para los grandes inversionistas, no de los clientes bancarios que usan sucursales. Poco efecto va a tener, porque continúan con negocios de Casas de Bolsa, por lo que inversiones en mercado bursátil continuarán, pero en términos de indicadores económicos y financieros su impacto no será tan relevante”.

Dio como referencia que, en otras administraciones cuando había crisis económica, lo primero que se hacía era prepara rescates bancarios, dar concesiones para sortear crisis, pero con esta administración es claro que no es algo que se tuviera pensado y al no contar con apoyos que pudieran dar factibilidad de tener crecimientos en sus negocios era poco factible mantenerse.

El efecto dominó en todo el mundo se va a visualizar. El grado y la potencialidad de ese efecto va a ser diferente en cada economía. En el caso de México la posibilidad de que grandes empresas financieras como no financieras puede establecer estrategias para ofrecer sus servicios en otros países o mantener rentabilidades adecuadas y aprovechar los costos bajos que ofrecen la economía mexicana.

No obstante, el gobierno debe echar mano de mecanismos de contención que evite la fuga de capitales.

ECONOMÍA EN PICADA

Recientemente, el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI) dio a conocer que el Producto Interno Bruto (PIB) sufrió la peor contracción en 88 años al cerrar el 2020 con una caída de 8.5 por ciento.

A esto se suma que, durante el mes de enero de este año, la actividad económica cayó 4.4%, como consecuencia de la emergencia sanitaria por el covid-19.

Adicionalmente, la inversión extranjera directa en México ha caído 641 millones de dólares durante la pandemia por el coronavirus. De acuerdo con la Secretaría de Economía esta caída representa una compactación de 43% con respecto a lo que se captó anualmente antes del virus.

“Los flujos de inversión extranjera directa en México han caído dramáticamente debido a la pandemia, pasando de 1.5 billones de dólares en 2019 a 859 mil millones en 2020”, dijo.

Jorge Sánchez, de la Fundación de Estudios Financieros explicó, “claramente la situación en México no va a mejorar, el entorno es complicado”.

“La crisis se puede prolongar más de lo esperado en el mundo porque una vez que la pandemia disminuya los gobiernos estatales y locales se encontrarán frente a importantes restricciones financieras por el gran endeudamiento en que han incurrido”, previó.

Fue en el Diario Oficial de la Federación donde se anunciaron los cierres de las oficinas de representación en México de ambas entidades, así como la revocación de la autorización para su establecimiento y operación por parte de la Comisión Nacional Bancaria y de Valores (CNBV).

A pesar de dichas decisiones, la Comisión Nacional Bancaria y de Valores (CNBV) reconoció que al al cierre del 2020, los 50 bancos en México estaban suficientemente capitalizadas para enfrentar escenarios de pérdidas no esperadas.

CRISIS AFECTA OTRAS INDUSTRIAS

Pero no solo en la industria de la banca hay salida o cierre de negocios. A finales del 2020, Best Buy anunció su salida de México.

Desde este año cerraron sus 41 tiendas en el país, “a pesar de este trabajo extraordinario, los efectos de la pandemia han sido muy profundos y no nos es viable mantener nuestro negocio en México”.

En este caso, al igual que con JPMorgan, según Díaz Mondragón, la cadena encontró que ya no era sostenible su estrategia en México.

Ahí sucede que las empresas deben redireccionar sus estrategias de negocios, pero cuando ellos deciden salir, no se nota tanto su ausencia porque hay otras empresas buscando competir el mercado que ellos abandonan.