Los Bengals terminaron con una sequía de 31 años sin ganar un juego de postemporada, esto después de derrotar a Las Vegas Raiders 26-19 y sellar su pase a la Ronda Divisional de la NFL.
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La última ocasión en que Cincinnati había ganado un juego de postemporada, fue el 6 de enero de 1991, cuando vencieron en ese entonces a los Houston Oilers ( hoy los Tennessee Titans) 41-14 para sellar su pase al Divisional de la AFC.
En la presente temporada el equipo comandado por el entrenador en jefe Zac Taylor comenzó dominando las dos fases del balón, con un Joe Burrow inspirado y dominante, que terminó por registrar un total de 24 de 33 pases completados para 244 yardas y dos pases de anotación.
A pesar de que Derek Carr y Los Raiders tuvieron un momento de reacción, no fue suficiente para dominar una defensiva que todo el tiempo estuvo ejerciendo presión para generar intercambio de balón.
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De esta manera, los Bengals enfrentarán a los Titans quienes vienen de semana de descanso tras colocarse como los sembrados número uno de la Conferencia Americana.