Julio César Chávez dejó una marca imborrable en el boxeo mexicano, y durante muchos de sus combates una banda roja en la cabeza lo acompañó, algo que se volvió característico de El César del Boxeo.
La historia de esta banda roja en la cabeza de JC Chávez inició el 21 de noviembre de 1987, cuando la leyenda del boxeo venció por nocaut técnico a Edwin Rosario en el onceavo round, y se proclamó campeón del mundo de los pesos ligeros.
Previo a la pelea, el puertorriqueño habló de más, incluso insultó a la familia de Chávez, afirmando que lo vencería por nocaut. No era secreto que el equipo de Rosario practicaba brujería, y todo llegó a los oídos del mexicano.
Aseguraban que Rosario lo estaba “trabajando” para que las cosas no le salieran bien ni en la pelea, ni fuera del ring. Ante esto, la solución de Julio César Chávez fue una banda roja en la cabeza, la cual cortaría cualquier maleficio o brujería que pudiera caer en El César del Boxeo.
Chávez no se mostró flexible al principio, pero al final accedió a la idea de ponerse un listón rojo en la cabeza para prevenir, y desde ese momento La leyenda del boxeo mexicano la uso en todas sus peleas.
Los aficionados mexicanos terminaron adoptándola como un símbolo de JC Chávez, y sus hijos Omar y Julio César Chávez Jr. la han usado en sus peleas.
La banda roja se volvió tan icónica entre los fans del boxeo, que aunque el Canelo Álvarez no la usa, es común ver que sus fans en Las Vegas portándola, aunque ya no con el apellido Chávez, sino con el apodo de El Canelo.
“Para romper el hechizo. Me estaban haciendo brujería, y eso es real porque me enseñaron la cubeta donde tenían mi foto con huelo, resulta que la mamá de Rosario, en paz descanse Rosario, hacía un poco de magia y de brujería y entonces supuestamente pusieron la foto mía en una bandeja con hielo para que estuviera engarrotado, yo no creía en esas cosas, pero me dicen ‘Julio, ponte la cinta roja, con eso vas a ahuyentar los malos espíritus”, señaló en entrevista para ESPN sobre su banda roja en la cabeza.
De acuerdo a Julio, Edwin Rosario había despertado en él un odio por como lo insulto, y a su familia, previo a la pelea.
“Esa pelea no la quería perder, iba a pelear con Rosario que me había ofendido tanto, se había portado grosero, me había mentado a mi mamá, había dicho muchas cosas, se había metido con mi familia y dije, le voy a arrancar la abeza a este, dije, lo voy a rebotar, lo voy a rebotar, y así fue, pero ahí nació la cinta roja y después desafortunadamente no la patenté, porque la mayoría ahora sube con ella y se hizo algo mexicano y apare me pagaban por ponérmela después, así que con gusto me la ponía”, señaló.
Aquella noche en el Hilton de Las Vegas, Julio César noqueó a Rosario y le arrebató el cinturón de peso ligero de la Asociación Mundial de Boxeo, el segundo título conquistado por el sonorense que mejoró su récord a 57-0.
(dmv)