Main logo

El impacto del mexicano Fernando Valenzuela en Grandes Ligas

Así fue la carrera de Fernando Valenzuela, considerado el mejor jugador de beisbol que ha dado México

Escrito en DEPORTES el

Fernando Valenzuela es el mejor jugador de beisbol que ha dado México, no es solo una opinión personal, es lo que en general expresan periodistas especializados, aficionados, jugadores y exjugadores mexicanos.

Ningún beisbolista nacional ha tenido tanto impacto en Grandes Ligas ni una carrera tan notable, Vinicio Castilla, Adrián González y otros han logrado cosas importantes, muy importantes, pero no a la altura de “El Toro de Etchohuaquila”, de ninguna forma minimizaría la carrera de otros peloteros mexicanos pero hay que dar a la de Fernando su justa dimensión.

Veamos las estadísticas de Valenzuela, si es justo que no haya sido elegido al Salón de la Fama y lo que Fernando representó (más allá de los números).

Fernando Valenzuela en cifras.

Valenzuela llegó a Grandes Ligas en 1980, apareció a finales de esa temporada como relevista, solo lanzó 10.0 entradas y no recibió carreras limpias.

En 1981 Valenzuela se ganó un puesto en el grupo de abridores de Los Dodgers. Para el juego inaugural él no estaba programado para lanzar pero lesiones y enfermedades le dieron el escaparate para saltar a la fama al derrotar 2 – 0 a los Astros de Houston, ese fue su punto de partida como ídolo en Los Angeles. Ganó sus primeros ocho juegos, cinco de ellos sin recibir carreras (por blanqueada). Para el término de la temporada, su récord fue de 13 ganados y 7 perdidos.

Fernando recibió ese año el premio Cy Young de la Liga Nacional, lo cual lo reconocía como el mejor pitcher del año. Venció en la votación a pitchers que son unos gigantes de la historia, como Tom Seaver, Steve Carlton y Nolan Ryan. También fue reconocido como el Novato del Año de la Liga Nacional. Fue quinto en la votación para el Jugador Más Valioso de la temporada. Fue un año de ensueño.

En ese mismo 1981 Valenzuela disputaría con Dodgers sus primeras series de post-temporada y su única Serie Mundial. Ante Houston, Montreal y Yankees obtuvo un récord de 3 – 1, completando los juegos ante Astros y Yankees.

Valenzuela disputó ese año también su primer Juego de Estrellas, lo cual repitió a lo largo de sus primeras seis temporadas. De esas seis ocasiones que fue seleccionado, tuvo participación en cinco encuentros y en ninguno de ellos le anotaron carreras. Comparte el récord de bateadores ponchados consecutivamente (5) en un Juego de Estrellas.

Después de obtener el Cy Young en 1981, quedaría dentro de los cinco primeros sitios en la votación en 1982 (3º), 1985 (5º) y 1986 (2º). En cada uno de esos años recibió también votos como MVP de la Liga Nacional.

En 1983 ganó el SIlver Slugger, como mejor bateador en su posición (pitcher). En 1986 recibió el Guante de Oro que lo acreditó como el mejor fildeador en su posición.

Como puede apreciarse, la carrera de Valenzuela tuvo un inicio vertiginoso, con múltiples reconocimientos pero después de la sexta temporada sus números empezaron a declinar. En 1986 ganó 21 encuentros pero después de eso no superaría la marca de 14 el resto de su carrera, en ocho de sus siguientes doce temporadas su Porcentaje de Carreras Limpias superó los 4.00, lo cual no es una buena historia, en ’84, ’85 y ’86 superó los 200 ponches pero no lo volvería a lograr. Hay una métrica importante en el beisbol actual que es el WAR, la cual estima cuantas victorias te entrega un jugador por encima de lo que haría uno de remplazo, de 1981 a 1987 solo tuvo un año con un WAR inferior a 3.7 pero a partir de ahí no llegaría a 3.0 en ninguna temporada. Del año 7 en adelante, perdió más juegos de los que ganó.

Valenzuela salió de los Dodgers después de la temporada de 1990, cuando el equipo decidió cortarlo al considerar que había dejado atrás sus mejores años. Sus siguientes años los pasó con varios equipos: Angels, Baltimore, Philadelphia, San Diego y San Luis.

En cuanto a playoffs, también lanzó para Dodgers en 1983 y 1985, ganando dos partidos y sin derrota. En 1988 los Dodgers llegaron a la Serie Mundial y la ganaron pero Valenzuela no fue activado dado que estaba lesionado. Con Padres tuvo una breve participación en 1996.

Fernando terminaría su carrera con 173 victorias y 153 derrotas a lo largo de 17 temporadas, su Porcentaje de Carreras Limpias fue de 3.54 y ponchó a 2,074 bateadores.

Se retiró en 1997, siendo el noveno pitcher con más victorias en la historia de los Dodgers con 141, es el octavo lanzador de Dodgers con WAR más alto con un acumulado de 33.0, es también noveno en entradas lanzadas con la escuadra angelina y sexto en ponches. Ocupa un lugar en la historia del equipo en el aspecto numérico.

¿Debería estar Valenzuela en el Salón de la Fama?

Muchas veces he escuchado que Fernando debería estar en el Salón de la Fama de las Ligas Mayores por lo que representó en 1981 y a lo largo de su historia, como el beisbolista mexicano más grande que hemos tenido. Tengo claro que ser elegido a Cooperstown no solo pasa por los números, hay más factores, pero las estadísticas son fundamentales en el proceso de selección porque le dan objetividad y porque son el testimonio numérico de la carrera del beisbolista.

Bill James, a quien podríamos llamar el padre de las estadísticas del beisbol, desarrolló un modelo llamado “Similarity Scores” que tomando diversos factores nos dice cuales jugadores tuvieron una carrera similar, de los 10 lanzadores que tienen estadísticas similares a las de Valenzuela (usando este modelo), ninguno está en el Salón de la Fama.

Hay algunos lanzadores en el HOF (Salón de la Fama por sus siglas en inglés) que en algún rubro están por debajo de Fernando, miré sus casos para entender si están ahí teniendo menos méritos que Valenzuela. Deseché los de pitchers de inicios del siglo XX porque muchos de ellos fueron elegidos cuando no había tanto historial para comparar y hoy simplemente no entrarían, tampoco tomé a relevistas porque a ellos se les mide diferente.

Victorias. Valenzuela obtuvo 173 triunfos, Hoyt Wilhelm está adentro con 143 triunfos y Sandy Koufax con 165. El Porcentaje de Carreras Limpias (PCL) de Wilhelm es de 2.52 y su WAR 49.7, ambos números mejores que los de Fernando. Koufax tiene un PCL de 2.76, WAR de 53.1 y su promedio de hits recibidos más bases por bolas por entrada (WHIP) es mucho menor que el de Fernando (1.106 vs. 1.320).

Porcentaje de Carreras Limpias. Valenzuela terminó con PCL de 3.54, hay algunos pitchers en el Salón de la Fama con números “peores”. Jack Morris tiene 3.90 sin embargo haber ganado 254 juegos en comparación de los 173 de Fernando lo ponen en mejor situación, lo mismo que su WAR, Morris es considerado hoy uno de los lanzadores menos merecedores de estar en el HOF. Mike Mussina, recientemente elegido tiene 3.68 pero casi 100 triunfos más que Valenzuela (270) y su WAR es 82.8 (comparado con el 37.4 del mexicano). Tom Glavine acabó su carrera con el mismo PCL pero con 305 triunfos.

WAR. Hay dos pitchers con WAR parecido al de Valenzuela. Catfish Hunter posee un WAR de 36.30, su PCL es 3.26 (no mucho mejor), ganó 224 partidos y esa puede ser la diferencia. Bob Lemon tiene un WAR de 37.56, casi igual al de Fernando, sus 207 triunfos si lo superan y su PCL es ligeramente mejor, es el lanzador en el HOF con el que más podríamos comparar a Valenzuela pero fue seleccionado en 1976, cuando había menos pitchers con números importantes.

Mejores 5 años consecutivos. Valenzuela logra sus mejores 5 años consecutivos, basados en WAR, de 1983 a 1987, acumulando 21.5. Ese número lo pone por encima de lanzadores como Morris y Don Sutton pero aún siendo grandes años se quedan lejos de los 42.2 de Randy Johnson, 39.2 de Maddux, 39.1 de Koufax o su contemporáneo Dave Stieb con 32.4.

Las estadísticas desafortunadamente no respaldan el caso de Valenzuela para el Salón de la Fama. Dicho eso, es injusto que en su primer año obtuviera 6.2 por ciento de los votos de los periodistas y en el segundo solo 3.8 por ciento, al no haber llegado al 5 por ciento su nombre ya no apareció en la boleta del siguiente año por lo que el único camino que le queda es que en algún momento el Comité de Veteranos lo elija. Un jugador tiene que obtener 75 por ciento de votos para llegar al HOF, lo cual nos habla del complicadísimo camino que tenía Valenzuela por delante y creo que sus resultados numéricos no permitirán que incluso el Comité de Veteranos lo elija.

Fernando, mucho más que números.

Los números de Fernando son los de un muy buen pitcher, con 6 magníficos años. Me queda claro que no alcanzan para el Salón de la Fama y estoy de acuerdo en eso, pero “El Toro” fue mucho más que estadísticas, aquí algunos de sus grandes momentos.

Juego inaugural de 1981.

Jerry Reuss sería el abridor de Dodgers en el primer juego de la temporada pero una lesión obligó al manager Tom Lasorda a ir con el novato Valenzuela. Fernando respondería con un juego completo y una blanqueada a su estilo … no 100% dominante todo el partido pero sacando los outs importantes a la hora buena … en 5 de las primeras seis entradas se le embasaron pero resolvió todos los problemas y ganó 2 – 0.

Ocho victorias consecutivas iniciando su carrera.

Después de derrotar a Houston, Valenzuela ganaría sus siete siguiente aperturas, lanzando extraordinariamente:

·        Dodgers 7 – San Francisco 1. Juego completo de Fernando.

·        Dodgers 2 – San Diego 0. Juego completo.

·        Dodgers 1 – Houston 0. Juego completo.

·        Dodgers 5 – San Francisco 0. Juego completo.

·        Dodgers 6 – Montreal 1.

·        Dodgers 1 – Mets 0. Juego completo.

·        Dodgers 3 – Montreal 2. Juego completo.

El partido contra Montreal en donde no completó el juego, fue de 10 innings y Valenzuela lanzó nueve.

“Fernandomanía”.

Lo que Fernando creó con ese asalto a Grandes Ligas en 1981 no tiene paralelo, llevo viendo beisbol muchos años y ningún pitcher novato (incluidos Mark Fidrych y Gooden) ha tenido el impacto de Valenzuela. En Los Angeles lo adoraban pero se volvió un fenómeno para todo California y el resto de los Estados Unidos. En todos los periódicos de USA aparecían reportajes de sus humildes orígenes y su improbable ascenso a la fama. Era ídolo de los latinos. Cuando los Dodgers jugaban como visitantes, en promedio había 9,000 personas más en los estadios cuando él lanzaba.

Su estilo de pitcheo enloqueció al mundo, sus ojos apuntando al cielo, su lanzamiento de screwball que prácticamente nadie más tenía, su forma de salir del campo entre entradas, con un andar de torero, su cuerpo que nos hacía pensar que era tan humano como nosotros (con unos kilitos de más), cautivaron a todos los que lo vimos.

Los aficionados al beisbol vimos en televisión o escuchamos en radio todos o casi todos sus encuentros en 1981, en las noches que lanzaba, estábamos ahí, acompañando a Sony Alarcón y Toño de Valdés en la televisión o a Jaime Jarrín en radio. Mi padre y yo no nos perdimos un juego, ni uno, era mexicano, era uno de nosotros.

Playoffs de 1981.

Al concluir la temporada de 1981 (penosamente interrumpida hacia la mitad por una huelga de los beisbolistas), Valenzuela fue líder de Dodgers en victorias, ponches y entradas lanzadas. Los Angeles calificaron a playoffs, en donde enfrentarían primero a Houston, a quienes vencieron 3 juegos a 2. Fernando abrió el primer partido pero se fue sin decisión tras recibir solo una carrera, en el juego cuatro empató la serie para Dodgers al lanzar juego completo de solo una carrera y 4 hits.

Ante Montreal Valenzuela lanzó el segundo partido y lo perdió, a serie se iría al límite de 5 juegos y Fernando fue el responsable de lanzar el quinto y definitivo, tirando una joya de una sola carrera en 8.2 entradas, ese juego lo ganaron los Dodgers en la 9ª con un histórico homerun de Rick Monday.

En la Serie Mundial ante Yankees, los Dodgers perdieron los primeros dos juegos. Valenzuela quedó con la poco envidiable tarea de regresarlos a la vida en el juego 3, disputado en Los Angeles. No fue el mejor partido de Valenzuela pero el carácter que demostró ese día aún lo recuerdo, Los Ángeles tomó la ventaja de 3 – 0 pero Yankees respondió con dos carreras en la segunda y dos más en la tercera, parecía que Fernando saldría pronto pero a cambio de eso se repuso y lanzó el juego completo pese a recibir nueve hits y dar 7 bases por bolas, pero a su más puro estilo fue capaz de apretar a la hora buena y evitar más daño, Dodgers terminó por ganar el juego 5 – 4 y no perderían ya uno más, ganando la Serie Mundial en 6 partidos … Valenzuela ganó ese tercer juego de la serie aún no estando en una buena noche, pero su valor, fortaleza mental y su brazo de oro sacaron adelante a su equipo.

Juego de Estrellas 1986.

Fernando participó en seis juegos de estrellas consecutivos, siendo del de 1986 el último. En ese encuentro entró a relevar en la cuarta entrada y ponchó a cinco bateadores en forma consecutiva: Don Mattingly, Cal Ripken Jr., Jesse Barfield, Lou Whitaker y Teodoro Higuera … hasta hoy ese récord (empatada con Carl Hubbell) sigue vigente.

Victorias en 1986.

Valenzuela logró su única campaña de 20+ victorias en 1986, alcanzando un total de 21, suficientes para ser el líder de la Liga Nacional en ese rubro. Fue segundo en entradas lanzadas, primero en juegos completos con 20, tercero en WAR. Si Mike Scott de los Astros no hubiera tenido una campaña de ensueño, Fernando podría haberse llevado su segundo Cy Young.

Quiero aprovechar el dato de 20 juegos completos para cubrir una crítica que he escuchado muy grande hacia Tom Lasorda, se habla en México de que Fernando Valenzuela dejó de ser efectivo por sus lesiones en el brazo y que éstas se deben a que Lasorda lo utilizó en exceso, que lo dejaba completar demasiados juegos. El beisbol cambió drásticamente este siglo, por ejemplo el año pasado ningún pitcher tuvo más de 3 juegos completos, pero en los 70’s y 80’s era un beisbol diferente, se esperaba que los lanzadores grandes completaran los juegos, Fernando fue líder de juegos completos en la Liga Nacional 3 temporadas, su carga era similar a las de otras estrellas de su tiempo, a Valenzuela creo que le pasó factura en el brazo un lanzamiento tan complicado como el screwball pero sin él no hubiera llegado a las alturas que alcanzó. Aún hoy, no creo que Lasorda o los Dodgers lo hayan maltratado.

Juego Sin Hit ni Carreras.

Casi al término de su paso por Dodgers, en 1990, cuando ya sus mejores años habían quedado atrás, Valenzuela logró la hazaña de lanzar un juego sin hit ni carreras ante los Cardenales de San Luis. Requirió 119 lanzamientos, con siete ponches y tres bases por bolas. Para la siguiente campaña, Valenzuela lanzaría para Los Angeles de California, terminando su carrera de 11 años con Dodgers.

Valenzuela actualmente es comentarista en español de los Dodgers. El año pasado fue nombrado Comisionado de la Liga Mexicana de Beisbol. Sigue siendo el hombre humilde, entregado al beisbol y a México que conocimos desde sus primeros años en Grandes Ligas.

No ha habido un mejor jugador mexicano de beisbol que el gran Fernando Valenzuela, no solo por sus números sino por su impacto en las Ligas Mayores, en los Dodgers y en los aficionados a la pelota caliente en México y Estados Unidos. Sus años a máximo nivel fueron 6, lo cual es mucho más de lo que cualquier otro pitcher mexicano ha logrado. Hay otros jugadores mexicanos con 17 temporadas en el mejor beisbol del mundo pero ninguno con logros cercanos a los de Valenzuela.

Medir a Fernando por sus números nos muestra su gran carrera, medirlo por sus logros lo pone en un lugar único en la historia del beisbol mexicano, medirlo por lo que generó en 1981 lo coloca a la altura de los mejores en la historia del beisbol de Grandes Ligas.