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Christian, un “Ave Fénix” en el deporte

Promesa del futbol, vio truncada su carrera por la delincuencia, pero regresó al deporte de alto rendimiento

Escrito en DEPORTES el

Las historias que conocemos de los deportistas más fuertes, son las que más obstáculos han tenido que enfrentar en la vida. En el futbol no todo es gloria y victorias, así lo entendió Christian Hernández, un exjugador de Pumas al que la delincuencia le arrebató su sueño de ser un reconocido futbolista, y en cambio le dio un espíritu luchador con el que ha logrado salir adelante.

Ante todo pronóstico, Christian Hernández le demostró a sus más cercanos que cuando se quiere se puede. La vida del canterano de Pumas cambió por completo tras ser víctima de la delincuencia. En 2014 al salir de un entrenamiento en Veracruz sufrió un asalto, aquel desafortunado suceso lo dejó con tres cervicales rotas y un obligado retiro de su pasión, el futbol.

Christian se formó en las Fuerzas Básicas de Pumas y desde los 10 años vistió los colores del equipo con el que creció. Se desempeñaba como volante por la derecha.

“Hice pruebas en la categoría 89 y fui pasando los diferentes procesos hasta llegar al equipo. Decidí ser futbolista porque toda mi familia es futbolera, iba seguido al estadio con mi papá y hermanos así que eso fue lo que me impulso a jugar fútbol”, señaló Christian para LA SILLA ROTA.

Hernández puede presumir de haber hecho pretemporadas con el primer equipo de Pumas mientras distintos Técnicos estaban al frente del club, como Ricardo ‘Tuca’ Ferreti, Memo Vázquez y Toño Torres Servín.

En 2013 Christian decidió salir de Pumas ante la falta de oportunidades, pues los entrenadores no volteaban a La Cantera. Así, decidió marcharse a los Delfines de Coatzacoalcos, una escuadra que pertenecía a la Segunda División Nacional.

Sin embargo, fue fuera de la cancha donde le cambió la vida. Aquel día, Hernández no concentró con la escuadra de Delfines que partió a Zacatecas, y se quedó en la casa club en el Puerto. Entrada la noche del 22 de marzo de ese año, el volante, junto a un compañero, buscaba un lugar para cenar, cuando fueron interceptados por un grupo de cuatro asaltantes, golpeando a Christian, quien sufrió lesiones en la cabeza y en el cuello.

“Me asaltaron saliendo del entrenamiento y me golpearon, fueron 4 tipos. Me rompieron las cervicales (c3, c4, c5) lo que ocasionó que quedará cuadrapléjico”.


Los diagnósticos no eran alentadores. Los doctores daban escasas esperanzas para una recuperación que le devolviera independencia en su vida cotidiana. Pero Christian sabía que no podía dejarse vencer.

“Mi primer pensamiento fue que iba salir adelante muy rápido, que iba a regresar a la normalidad en mi vida, pero obviamente no es así, es un proceso muy lento pero poco a poco he ido superando los diagnósticos y ahora solo me enfoco en salir adelante y disfrutar”, asegura Hernández.

Tras la tragedia, el canterano felino no solo recibió el apoyo de su familia, también de algunos jugadores de Pumas y Chivas. De hecho, en 2014, mientras todo el mundo tenía los ojos puestos en el Mundial de Brasil, el equipo Universitario decidió apoyar a Christian y a su familia realizando una subasta de tres playeras conmemorativas firmadas por figuras como Enrique López Zarza, Luis García Postigo, Jorge Campos, Efraín Velarde, Darío Verón, Marco Palacios y Sergio Bernal.

“Chispa”, como lo apodan, aceptó el reto y decidió no aceptar las únicas posibilidades que le daban. Así, con el apoyo de su familia y amigos, su principal motor como él asegura, ha logrado luchar contra toda adversidad para conseguir su recuperación (física y psicológica) con una meta clara en mente, no alejarse del deporte.

“Mi recuperación física es hacer 3-4 sesiones de terapia al día (consiste en elíptica 1 hora, terapia ocupacional, gimnasio y control de tronco). Psicológicamente, el tiempo que estuve en el instituto nacional de rehabilitación platicaba con los psicólogos pero también ayudó mucho el apoyo de mi familia y amigos además de que la clínica a la que voy (fisioscdmx) todo el tiempo están ayudándome a mantenerme enfocado en lo que puedo hacer”.

Christian nunca ha pensado en dejar el deporte, ahora practica remo y en esa disciplina ha comenzado a enfocar algunas de sus metas.

“El deporte siempre me ha gustado, me considero una persona muy activa así que nunca he considerado dejar el deporte, lo único que ha cambiado es que ahora tiene que ser desde una silla de ruedas”, afirmó el deportista.

“Chispa” no solo espera practicar remo como ayuda a su recuperación, gracias a su gran espíritu tiene firmes sus metas y sueños a partir de ahora: competir, conquistar y verse en lo más alto representando a México.

“Quiero competir en los paralímpicos y ganar una medalla, dar pláticas motivacionales y haré todo para cumplirlo”.

Christian Hernández es un claro ejemplo de los valores que el deporte puede impregnar en los jóvenes, y su mensaje es claro, superar cualquier obstáculo y disfrutar los buenos momentos pese a cualquier situación.

“Siempre existirán inconvenientes en nuestra vida pero depende de nosotros mismos superar esos obstáculos y hacer todo para salir adelante. Hay que tratar de disfrutar todo tipo de momentos porque gracias a los malos momentos, aprendemos a disfrutar más los buenos”.

AJ