CIUDAD DE MÉXICO (La Silla Rota).- Luego de seis meses de vigencia, el grupo de trabajo que se creó en la Cámara de Diputados para investigar el caso Tlatlaya cerró sus trabajos sin conclusiones claras sobre lo que sucedió el 30 de junio de 2014 en ese municipio del Estado de México.
Los legisladores presentaron un listado de 39 puntos como parte de su informe final en el que destaca el señalamiento a la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) por su resistencia a no entregar la información requerida.
Los legisladores se sumaron a las consideraciones de la Comisión Nacional de Derechos (CNDH) respecto a que los mayores “impedimentos” para determinar las circunstancias de los hechos se encuentran en la “alteración de vestigios” y del lugar de los delitos, presuntamente por parte de elementos de la Sedena.
También se acogen a la idea de que hubo tortura e intimidación en agravio de las victimas sobrevivientes presuntamente por funcionarios del gobierno del Estado de México y a las deficiencias en la recolección de las pruebas, preservación de la escena, cadena de custodia, análisis pericial y otras actuaciones en las que presuntamente incurrieron servidores públicos estatales.
Respecto a la colaboración de la Sedena, PGR y del gobierno estatal de Eruviel Ávila, el grupo de trabajo de legisladores consideró que ésta fue “notoriamente insuficiente”, por lo que hicieron un “respetuoso llamado” a dichas instituciones para que faciliten la rendición de cuentas al Poder Legislativo y atiendan sus obligaciones de transparencia.
En ese sentido, los legisladores consideraron que en este caso se está ante el uso ilegal, excesivo y desproporcionado de la fuerza por parte de algunos elementos de la Sedena involucrados, que tuvo como consecuencia que, cuando menos, 12 personas fueran privadas de la vida en un contexto de “ejecuciones extrajudiciales”.
Las diputadas Elena Tapia (PRD) y Loretta Ortiz (Morena) dijeron que son “frustrantes” estas conclusiones por que la Cámara de Diputados forma parte del Estado mexicano y no hubo colaboración de las instituciones para esclarecer esta tragedia bajo el argumento de las que investigaciones están en curso.
El 30 de junio de 2014, un total de 22 personas fueron asesinadas en circunstancias aún no claras en el municipio de Tlatlaya, en manos de integrantes del Ejército mexicano. De acuerdo a información oficial, las personas muertas era parte del crimen organizado.
asm