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¿Cómo afecta al mundo la reelección del presidente de Turquía?

Bajo el nuevo sistema, se suprime la oficina del primer ministro, se reducen los poderes del parlamento y se le otorga al presidente Erdogan amplia autoridad

Escrito en MUNDO el

Recep Tayyip Erdogan ya era el gobernante más longevo de Turquía. El resultado de las elecciones del domingo es un respaldo a las medidas cada vez más duras del Presidente y que elevarán las alarmas de las potencias occidentales.

Otros líderes, desde el ruso Vladimir Putin hasta el somalí Mohamed Abdullahi Mohamed, felicitaron rápidamente al ex futbolista y al alcalde de Estambul por su victoria.

"Los ganadores de las elecciones del 24 de junio son Turquía, la nación turca, los enfermos de nuestra región y todos los oprimidos (personas) en el mundo", dijo Erdogan en su discurso de victoria. Pero, ¿qué significan realmente los resultados de las elecciones?

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Erdogan aprieta su agarre

Erdogan comienza un nuevo mandato de cinco años como presidente con amplios poderes otorgados en un referéndum ganado el año pasado y que fue denunciado por sus críticos como un descarado golpe de poder.

Bajo el nuevo sistema, se suprime la oficina del primer ministro, se reducen los poderes del parlamento y se le otorga al presidente una amplia autoridad ejecutiva. Erdogan también podrá presentarse a otro término, lo que significa que podría estar en el cargo hasta 2028.

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Erdogan tiene un poder consolidado en cada paso de su carrera. Ha aplastado las protestas antigubernamentales, y en 2013 evadió una investigación de corrupción sobre su círculo íntimo. Después de un golpe militar fallido para sacar a su gobierno del poder en 2016, eliminó a sus oponentes al despedir a decenas de miles de trabajadores del gobierno, destripar instituciones públicas, encarcelar voces críticas y reprimir a los medios.

Malas noticias para la oposición

La oposición dio su mejor oportunidad, pero al final se decepcionaron de las urnas. Sin embargo, a pesar de la casi silenciosa oposición de Erdogan, casi la mitad de los turcos que votaron votaron en contra de él. Eso significa que todavía tienen voz en el parlamento, y la esperanza para la oposición es que el impulso ganado durante la campaña electoral continuará.

Un resultado mixto para los kurdos

El ejército turco ha estado luchando contra el separatista Partido de los Trabajadores del Kurdistán (PKK), considerado una organización terrorista por los EE. UU., La UE y otros, durante casi cuatro décadas, y el AKP de Erdogan ha descartado volver a un proceso de paz que colapsó en 2015.

A pesar de la resonante victoria de su archienemigo en las elecciones del domingo, en muchas aldeas kurdas todavía hubo celebraciones. El Partido Democrático de los Pueblos (HDP), orientado hacia los kurdos, superó el umbral del 10% para ingresar al parlamento, echando por tierra los planes de Erdogan para excluir allí a la representación kurda.

Esto se logró a pesar de que Selahattin Demirtas, el candidato presidencial del partido, estaba en prisión por acusaciones endebles de terrorismo, y una campaña electoral cuando no pasó un día sin algún tipo de ataque violento contra el HDP.

Más daño a la libertad de expresión

Un clima sofocante de miedo ha envuelto el panorama mediático de Turquía. Según Amnistía Internacional, más de 120 periodistas siguen encarcelados desde el fallido golpe de Estado de 2016. La pregunta ahora es si Erdogan los liberará. En cualquier caso, el sesgo de los medios fue claro a lo largo de la campaña electoral y en la noche de las elecciones, cuando los políticos de la oposición se vieron aislados del aire a medida que los resultados llegaban.

La economía todavía está en territorio riesgoso

La lira turca subió tanto como un 3% el lunes y el índice bursátil de referencia del país avanzó. El mitin podría ser breve, sin embargo.

La moneda de Turquía, la lira, ha caído dramáticamente desde un intento de golpe en julio de 2016. El banco central ha aumentado las tasas de interés a casi un 18% en un intento por detener la marea, pero eso está acumulando dolor para los ciudadanos turcos.

Erdogan, quien dijo que quería un mayor control sobre la economía, ha empeorado las cosas al sugerir que quiere controlar las tasas de interés. Los inversores extranjeros, que temen una pérdida de independencia en el banco central, han tomado vuelo.

La ofensiva de Turquía continuará

Erdogan dijo que Turquía continuará "liberando las tierras sirias" durante su discurso de victoria el domingo, informó Reuters. Desde enero, Turquía ha estado llevando a cabo una operación militar contra grupos kurdos en el noroeste de Siria para limpiar el área fronteriza de las milicias que considera son organizaciones terroristas.

La ofensiva ha puesto a Turquía en desacuerdo con los Estados Unidos, su aliado de la OTAN, que apoya a algunas de las fuerzas kurdas que son blanco de Turquía. En marzo, Estados Unidos advirtió que la operación de Turquía en el noroeste de Siria estaba distrayendo la lucha contra el ISIS y había permitido que el grupo terrorista reforzara sus fuerzas en algunas áreas.

Quedan dudas sobre la alianza de la OTAN

Bajo Erdogan, Turquía se convirtió en el miembro más problemático de la OTAN. Además de socavar la política de Estados Unidos. En Siria, los dos aliados de la OTAN han debatido sobre una serie de cuestiones en los últimos años, lo que ha llevado a cuestionar el papel de Ankara en la alianza militar.

Turquía también inquietó a los aliados de la OTAN al comprar misiles de largo alcance desde Rusia. El sistema de misiles no es interoperable con las defensas de la OTAN preexistentes, y el pu

El sistema de misiles no es interoperable con las defensas de la OTAN preexistentes, y la compra llega en un momento en que Moscú está flexionando sus músculos en el Medio Oriente.

Mientras los funcionarios turcos han renovado su compromiso con la alianza en los últimos meses, el secretario general de la OTAN, Jens Stoltenberg, ha calificado las tensiones como un "asunto difícil".

El camino de Turquía hacia la UE nunca se vio más lejos

Turquía, que tiene una parte de su territorio en Europa, solicitó unirse al precursor de la Unión Europea hace 30 años. Los caminos hacia las negociaciones de adhesión a la UE siempre fueron difíciles con el gran país de mayoría musulmana, pero bajo Erdogan se han vuelto aún menos probables en medio de las crecientes preocupaciones sobre la situación de los derechos humanos en Turquía.

Esta fue la primera elección en la que se presentó Erdogan cuando no criticó a la UE, posiblemente por temor a sacudir la ya frágil economía. Sin embargo, algunos analistas creen que ahora puede querer mejorar las relaciones, desde una posición de fortaleza.

La política exterior de Turquía se ha centrado cada vez más en la reconstrucción de las relaciones en los territorios del antiguo Imperio Otomano y más allá en el mundo musulmán. Ankara caracteriza con mayor frecuencia estas relaciones como derivadas de "lazos fraternales". La punta del poder blando para el alcance de Turquía es la agencia de desarrollo del país, TIKA, que implementa proyectos en los Balcanes, Medio Oriente y África.

Por ejemplo, Turquía ha establecido su mayor base en el extranjero en la devastada por la guerra de Somalia para entrenar a los soldados del país, mientras que sus agencias de ayuda implementan proyectos de desarrollo. Este alcance a través de las regiones también ha sido una parte integral de la búsqueda de Turquía de mercados más amplios. Cuando Erdogan viaja a países en estas regiones, es acompañado rutinariamente por asesores económicos y delegaciones comerciales.

Con información de CNN