Toluca (La Silla Rota).- Los proyectos carreteros de Toluca- Naucalpan y Atizapán-Atlacomulco han causado daños ecológicos a 220 manantiales, situados en los municipios de Huixquilucan y Xonacatlán, así como la destrucción de acuíferos subterráneos, sitios arqueológicos y áreas naturales protegidas, por lo que comunidades indígenas interpusieron juicios contra el gobierno federal y estatal.
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Jaime Vargas Martínez, representante de Pueblos Supremos Indígenas a Nivel Nacional, detalló que autoridades indígenas presentaron una demanda y lograron el amparo, sin embargo, a pesar que lograron la suspensión definitiva de las obras, los trabajos siguen su curso y el deterioro ambiental se acentúa.
Con base a la escritura 5978 - que consta en el expediente judicial- la extensión de áreas afectadas por la construcción de la autopista Toluca- Naucalpan abarca desde el kilómetro 19.980 de Llano Grande al kilómetro 30.620 de Rosa Invierno, atravesando varias comunidades indígenas en las que se ha afectado a alrededor de 140 mantos acuíferos en el municipio de Huixquilucan.
Mientras que la obra carretera de Atizapán- Atlacomulco ha dañado a al menos 80 manantiales situados en la comunidad de Villa del Carbón.
Los representantes de las regiones afectadas, advirtieron, debido al desacato de las autoridades federales y estatales están dispuestos a quemar la maquinaria de las empresas encargadas de la construcción. (IUSA y OHL).
Nos están orillando a lo radical, que sería un enfrentamiento civil contra el gobierno y las constructoras; a quemar maquinarias, desgraciadamente a eso nos están orillando”.
Anunciaron que de no obtener una respuesta inmediata a sus demandas recurrirán a la Corte Interamericana de Derechos Humanos, pues como comunidades indígenas les asiste el derecho de ser consultadas para el desarrollo y conclusión de este tipo de obras.
Sostuvieron que su deber es preservar la historia e identidad de las etnias, así como evitar el deterioro ambiental que ocasiona este tipo de obras, bajo el argumento que se está detonando el desarrollo económico y social.
Creen que con autopistas y puentes vamos a vivir cuando estamos sumergidos en la pobreza… los puentes no nos van a abastecer de comida…ellos son los que se enriquecen con obras como estas, el gobierno está acabando con nosotros mientras nosotros continuamos en la pobreza”, expresó Manuela Martínez, una de las afectadas.
Aseguraron que han conseguido diversos amparos que han sido ignorados por las autoridades gubernamentales, de ahí que no cesarán en la lucha hasta frenar el impacto ambiental ocasionado por ambos proyectos carreteros.
Hay evidencias que kilómetros de bosque se han perdido y varios ojos de agua se han secado. Es un verdadero ecocidio, por eso estamos preocupados”, lamentaron.
Dieron a conocer que peritos de la Procuraduría General de la República (PGR) acudirán a las zonas afectadas de Huixquilucan para verificar el monto de los daños ocasionados por la autopista Toluca-Naucalpan.
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