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Así se reconfigura el crimen organizado en Tepito

Tras la captura de “El Betito” hay tensa calma en el barrio; se prevé que 6 grupos busquen ampliar su poder

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Escrito en ESPECIALES LSR el


La mañana del domingo 5 de agosto, Roberto Mollado Esparza “El Betito”, acudió al Reclusorio Norte a visitar a un hermano suyo, y uno de sus principales consejeros, con quien planeaba una nueva incursión a Tepito para someter a los grupos delictivos fuera de su dominio.

Lo anterior se supo debido a que la Policía de Investigación, de la Procuraduría capitalina (PGJCDMX) tenía un informante dentro del reclusorio que se enteró de dicha reunión horas antes y que sugirió montar un operativo para arrestarlo.

Sin embargo, cuando “El Betito” salió del penal, los agentes dudaron que fuera él, debido a su radical cambio de apariencia y decidieron no detenerlo.


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Tres días más tarde, agentes federales arrestaron a Mollado Esparza en el Pedregal y su plan de entrar nuevamente al Barrio Bravo no se llevó a cabo.

Aunque sea temporal, Tepito vive hoy en calma. Al tiempo que se espera una reconfiguración de los grupos delictivos que operan en la zona.

El reacomodo en Tepito

Un informe de la Secretaría de Seguridad Pública (SSP-CDMX), elaborado el 11 de agosto pasado, detalla cómo quedó la Unión en Tepito y los objetivos criminales que aún quedan por detener.

En el documento se precisa que la Unión Tepito, fundada por los hermanos Hernández Gómez, quedó prácticamente desmantelada tras el asesinato, en 2017, de Francisco Javier “Pancho Cayagua”.

Quedan libres sus hermanos Armando “El Ostión”, Julio César y María Magdalena, quien cuenta con antecedentes penales, según la partida 584/RO/1996.

Armando  Hernández “El Ostión”.

María Magdalena Hernández Gómez.

También la esposa de “El Ostión” es objetivo de las autoridades. Se llama Judith Camarillo Feijoo, y de igual modo estuvo presa en 2003, acorde al expediente 252/RO/2003.

El resto de los cabecillas de este grupo delictivo ya fueron encarcelados.

De este modo, Tepito quedó en manos de las siguientes organizaciones criminales: la de Leticia Vargas “La Patrona”, el “Salchicha con Huevo”, los de “La Rinconada, “El Cártel del 21” y “Los Batlea”, encabezados por un ex policía de la PGJ local.

Entre todos se reparten aproximadamente 40 puntos de venta de estupefacientes, según cálculos de los oficiales de Inteligencia.

"El Salchicha con Huevo".

Por último está la Unión de la B, fracturada por la detención de “El Betito”, pero que cuenta, según el informe de la SSP con dos líderes visibles.

Se trata de Mauricio Hernández Gasca “El Manzanas”, dedicado a la extorsión a comerciantes del Barrio Bravo y el Centro, y David García Ramírez “El Pistache”, que controla la venta de droga en antros de Polanco, Roma Condesa y la Del Valle.

Mauricio Hernández Gasca “El Manzanas”. 

Al dividirse la Unión de la B, el resto de las bandas delictivas que operan en Tepito y que no luchan entre sí, resultaron fortalecidas, acorde con los agentes de Inteligencia de la SSP, consultados por LA SILLA ROTA.

Con base en estimaciones que tiene la Procuraduría, Tepito es aún el principal de abastecedor de drogas no solo a consumidores individuales, sino a otras bandas del norte de CDMX y oriente del Estado de México.

Cada día se venderían entre 5 y 10 kilos de cocaína, y alrededor de 1.5 toneladas de mariguana.

En mayo, la coordinación de Cuauhtémoc 3 fue totalmente reestructurada. Todos sus mandos y agentes fueron reubicados tras darse a conocer un video donde se aprecia a dos agentes de Investigación recibiendo dinero en el 21 de Jesús Carranza.

Desde entonces, las capturas de “dealers” se incrementaron, lo mismo que operativos.

Tepito podría volver a caer en una espiral de violencia si “El Betito” es regresado a una cárcel capitalina, pues desde allí podría seguir con su plan de tomar, por completo, al barrio más estigmatizado por la criminalidad.


JGM