PACHUCA.- Ingrid Verónica Guerrero, presidenta de la organización civil Yo Te Creo, informó que la asistencia por violencia familiar que brinda el organismo pasó de febrero a dos o tres casos por semana a 13 o 14 en marzo; dicho incremento coincide con el confinamiento, que empezó el 20 de marzo pasado, derivado de la pandemia de covid-19.
La psicoterapeuta humanista y sexóloga detalló que desde el 13 de abril hasta este jueves los han contactado cuatro mujeres mayores de 18 años y tres responsables de niños menores de diez años (pidiendo atención para los infantes).
Asimismo, otras siete personas les pidieron información para saber a dónde llamar o acudir, en caso de que una persona allegada a ellos esté viviendo algún episodio de violencia.
En Hidalgo, las denuncias por violencia familiar aumentaron un 69 por ciento de febrero a marzo, al pasar de 435 a 631, de acuerdo con datos del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública (SESNSP).
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Como alternativa, la organización propone que las autoridades de Hidalgo integren a las actividades de educación en casa la promoción de los derechos sexuales, reproductivos y humanos, así como la prevención de los diferentes tipos de violencia, a través de una educación sicoemocional integral.
La activista considera que, ante esta situación, la pandemia “ofrece la oportunidad” de que las autoridades educativas “redireccionen” los contenidos para niños y jóvenes, quienes toman clases desde sus hogares, a través de la estrategia Mi Escuela en Casa.
Las matemáticas y ortografía para después, y la promoción de los derechos sexuales, reproductivos y humanos, así como la prevención de las violencias, a través de una educación sicoemocional integral de la sexualidad, es vital para la prevención de las violencias en esta pandemia".
“Si está en manos de las autoridades, creo que tendrían que priorizarlo y hacer uso de los canales digitales para difundir esta información”, opinó en entrevista con LSR Hidalgo.
RECOMENDACIONES
Verónica Guerrero recomendó que, en caso de que niños adolescentes sean víctimas de violencia doméstica o algún delito, se acerquen a adultos de confianza, que puedan escucharlos y brindarles alternativas de acompañamiento, apoyo y solución.
En caso de que sean adultos, principalmente mujeres, pidan atención a través de los teléfonos o líneas de atención que ofrecen el gobierno de Hidalgo y los municipales, así como a organizaciones como Yo Te Creo, Servicios de Inclusión Integral y Derechos Humanos AC (Seiinac) o a la Red por los Derechos Sexuales y Reproductivos en Hidalgo (Ddeser), en donde están dispuestas a brindar contención y acompañamiento terapéutico en línea.
Este jueves, el gobierno de Pachuca habilitó una línea telefónica 711 07 07 para recibir denuncias de víctimas de violencia durante el confinamiento por la pandemia del coronavirus. Mientras que el gobierno estatal da atención a través del 800 912 1314 o el 911.
VIOLENCIA CONTRA LAS MUJERES DURANTE LA CONTINGENCIA
Phumzile Mlambo-Ngcuka, directora ejecutiva de ONU mujeres, advirtió que con el confinamiento por el coronavirus va en aumento otra pandemia en la sombra: la violencia contra las mujeres.
Señaló que el refugio en casa “aviva” la tensión y el estrés generados por preocupaciones de seguridad, salud y económicas. Asimismo, refuerza el aislamiento de las mujeres que tienen compañeros violentos, separándolas de las personas y los recursos que pueden ayudarlas. “es una situación perfecta para ejercer un comportamiento controlador y violento en el hogar”, subrayó.
De acuerdo con una publicación en el sitio web oficial de ONU mujeres, en los últimos 12 meses, 243 millones de mujeres y niñas (de entre 15 y 49 años de edad) de todo el mundo han sufrido violencia sexual o física por parte de un compañero sentimental. Por lo que estimaron que con el avance de la pandemia la cifra crezca “con múltiples efectos en el bienestar de las mujeres”, como su salud sexual, reproductiva y mental, así como su capacidad de liderar la recuperación de nuestras sociedades y economías, y de participar en ella.
También señalan que menos del 40 por ciento de las mujeres que sufren violencia buscan ayuda de algún tipo o denuncian el delito y menos del 10 por ciento de las que buscan ayuda recurren a la policía.
Las circunstancias actuales complican todavía más la posibilidad de denunciar, lo cual incluye las limitaciones de las mujeres y las niñas para acceder a teléfonos y líneas de atención y la alteración de servicios públicos como la policía, la justicia y los servicios sociales”, declaró Mlambo-Ngcuka.
La presidenta de Yo Te Creo señaló que cada familia está viviendo de manera diferente la emergencia sanitaria, empezando por las precariedades en casa hogar.
En el caso de algunas mujeres, niños y adolescentes, dijo que se están viendo obligados a compartir periodos de tiempo más prolongados con sus agresores, pues recordó que muchos de estos grupos vulnerables son agredidos por sus familiares, como padres, abuelos o tíos.
Indicó que las condiciones de desigualdad de género normalizan la violencia en contra de las mujeres, por lo que en ocasiones las víctimas no se percatan de las dinámicas violentas y hasta las pueden considerar como parte de su vida cotidiana, dijo. Por lo que advirtió que al normalizarlas pocas veces se animan a denunciar.
emh