Luego del accidente del vuelo 2431 de Aeroméxico, que cayó minutos después de haber despegado del Aeropuerto Internacional Guadalupe Victoria de Durango, el Periódico Victoria de Durango difundió una entrevista con Jacqueline Flores, una de las pasajeras que iba en el vuelo y narró cómo vivió el percance.
Yo venía adelante en el 8A y 8B con mi hija. Cuando se preparó para despegar yo sí sentí que estaba lloviendo muy fuerte, y que aceleró el avión para despegar y se elevó, pero entramos en una tormenta en una lluvia y el avión se cayó y empezamos a golpearnos porque se fue deslizando hacia adelante", relató la mujer, quien vive en Bogotá.
La pasajera narró cómo vio que se le quemaban las piernas a una niña de alrededor de 10 años (Especial)
[El avión] se deslizó largo tramo. Y empezó el humo, empezó el incendio. Justo ahí por el ala vi que había un hueco. Inmediatamente le quité el cinturón a mi hija y nos salimos por ahí. Los niños estaban gritando. Logramos salir por ese hueco, pero tenía llamas. Yo sí tenía miedo de saltar y quemarme, pero saltamos. Saltamos sin pensarlo", añadió Flores, quien asegura que los demás pasajeros y ella esperaron en una caseta blanca a que pasara la lluvia y a que llegara la ayuda.
De acuerdo con lo que ella recuerda, el avión despegó aproximadamente a las 15:09 horas e "inmediatamente se impactó" por la tormenta. La respuesta de las autoridades fue tras los 20-25 minutos después del accidente.
Luego de agradecer a Dios que ella y su hija se habían salvado, trató de consolar a otras familias que entraron en shock, como fue el caso de los parientes de una niña a la que se le quemaron las piernas, recuerda Jacqueline.
Ahora está preocupada porque su pasaporte y todos sus documentos quedaron en el avión siniestrado y no sabe cómo regresará a Bogotá.
mlmt