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Para Freddie, con amor

I won’t be a Rock Star. I will be a legend. - Freddie Mercury

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Escrito en OPINIÓN el
Este 5 de septiembre, Freddie Mercury, flamante vocalista del grupo Queen,  cumpliría 67 años de edad. Falleció el 24 de noviembre de 1991 debido a una bronco – neumonía relacionada con el SIDA. Próximamente cumplirá 22 años de fallecido. Freddie Mercury, nacido como Farrokh Bomi Bulsara, músico Inglés de origen  parsi e indio, cambió el mundo. 
Freddie Mercury retó al mundo a aceptar algo muy aparente que de manera consensuada estaban negando, su homosexualidad. En retrospectiva, uno ve a Mercury en concierto, y hasta parecería chiste que muchos se sorprendieron cuando de manera muy tardía salió del closet.  Pero cuando salió, desnudó al mundo, los enfrentó. Reveló la hipocresía de los que le dieron la espalda y la virtud de los que no les importaba. “People want art” decía, y él les dio una hermosa ópera dramática.
Freddie Mercury obligó a la gente a convivir  con la diferencia, ya que sus  preferencias sexuales eran del dominio común, no había excusa. El mundo tuvo que aceptar que les encantaba la música de un gay. Freddie se coló en todas las salas de todas las casas de todo el mundo. En los suburbios más conservadores de los Estados Unidos las familias discutían con sus hijos adolescentes sobre la homosexualidad. “They want showbiz” decía Mercury, y de repente, cada casa vivía su propia telenovela: hijos rebeldes, padres confundidos, todo con la banda sonora de Queen.
Freddie Mercury despertó a la juventud. A finales de los años 80, se provocó una controversia en varias preparatorias en los Estados Unidos ya que las autoridades educativas querían prohibir que sonará la canción We are the champions en las ceremonias de graduación. Los alumnos no se dejaron. Inspirados por la letra de aquella canción que se les negaba - We´ll keep on fighting, till the end-  lograron doblar las manos de aquellos que se ostentaban de educarlos, volviéndose ellos los educadores y promotores de la igualdad, tolerancia y aceptación. Fueron campeones. We are the Champions sonó en las graduaciones de ese año. We are the Champions sigue sonando en todas las graduaciones de todo el mundo hasta la fecha.
Freddie  Mercury nos saca lo mejor a todos. A aquellos alumnos estadounidenses les dio causa en exigir sus derechos. Sus canciones son himnos para activistas y para minorías. Sus letras nos hacen reflejar y nos inspiran a dar más de nosotros. Cuando escuchas su música, corres más rápido, amas más fuerte, saltas más alto.
Todos aman a Freddie, por que Freddie amaba al mundo.  Basta ver su presentación en el concierto de LIVE AID (13 de Julio de 1985) en el estadio de Wembley (http://www.youtube.com/watch?v=eQsM6u0a038) para ver como Mercury se entregó en cuerpo y alma a los presentes. Esta interpretación, alabada por muchos como la  mejor  presentación en vivo de la historia del rock, muestra a Freddie como lo es. Un súper hombre.
Freddie fue lo que fue, porque era lo que era. Cada vez que se subía al escenario, se desnudaba para el público. Esa es la honestidad que inspira, la que nos motiva a ser mejores. Son pocos los artistas que pueden ostentar unir al mundo con sus canciones. Yo he escuchado las canciones de Queen en bares de heavy metal, antros pop, Iglesias Cristianas y bodas gay. Siempre son coreadas. Gracias a Freddie Mercury este mundo es un poco mejor. La gente es un poco más valiente, y un poco más dispuesta a ser quienes son.
“They want to see you rush off in a Limousine”, dijo Freddie en 1977, y vaya que partió con enjundia. Un día antes de fallecer aceptó, públicamente, que había contraído SIDA. Lo hizo en un cuarto con su asistente, su novio desde hace seis años y sus gatos.  Al día siguiente, al despertar, mi hermano prendió MTV y nos enteramos de su muerte, todos  nos abrazamos, pusimos sus discos sin cesar.
Pinche Freddie, cómo te extrañamos. Cómo te queremos. Cómo nos haces falta.
Twitter: @RobertoMorris