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PRD: Cirugía plástica o amputación

Llegada Agustín Basave sólo como un cambio de rostro llevará a los amarillos a la extinción.

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Escrito en OPINIÓN el

No sabemos si los verdaderos jefes del PRD –“Los Chuchos”– intentan una cirugía plástica para ese partido o, por lo contrario se juegan la vida con una amputación.

 

No sabemos si la llegada de Agustín Basave a la presidencia de los amarillos será sólo un cambio de rostro o sí, por el contrario, supone una cirugía mayor.

 

Lo que sí sabemos sin embargo, es que si la llegada de Basave a la máxima posición del PRD fue planeada sólo como un cambio de rostro, el futuro de los amarillos podría ser la extinción.

 

Y es que ha sido tal el proceso de descomposición y descrédito de todos los partidos –incluido el PRD–, que una mera cirugía plástica en el partido del sol azteca sería igual a darle una aspirina a un enfermo de cáncer terminal.

 

Dicho de otra manera, que el PRD requiere de mucho más que un cambio cosmético; mucho más que una “manita de gato”. Lo que requiere es un cambio de fondo.

 

Y frente a esa realidad la gestión de Agustín Basave deberá dar muestras de inmediato, de que está dispuesta a la amputación de todo aquello que está podrido en el PRD.

 

Y si el nuevo jefe nacional del PRD se decide por esa amputación los cortes tendrán que ser –necesariamente–, en la tribu de “Los Chuchos”.

 

Y si alguien tiene duda de que en política –como en la sociedad de algunos felinos–, la única posibilidad de cambio es la eliminación del adversario, sólo basta ver lo que pasó en el PAN entre Ricardo Anaya y Gustavo Madero.

 

Como recuerda el joven dirigente de los azules Ricardo Anaya, fue hechura de Gustavo Madero, quien lo sacó de la nada y lo proyectó en tiempo record a la más alta posición del partido; la presidencia.

 

Ya en el cargo, Ricardo Anaya se encargó de sacrificar políticamente a su creador. Lo traicionó y lo empujó a la muerte política.

 

Hoy Gustavo Madero ya no es precandidato presidencial e incluso tiene dificultades para aspirar a la candidatura al gobierno de Chihuahua.

 

Un ejemplo idéntico se produjo en el caso de Cuauhtémoc Cárdenas y Andrés Manuel López Obrador. Como recuerdan, Cuauhtémoc Cárdenas era el “factótum”; el líder único.

 

Cárdenas cultivó a López Obrador, lo alentó, le dio posiciones y recursos y lo acompañó en distintas aventuras políticas.

 

Cuando López Obrador pretendía una tercera candidatura al gobierno de Tabasco, Cárdenas lo alentó para buscar la candidatura por el GDF; posición que le sirvió de trampolín al tabasqueño para buscar la candidatura presidencial en el año 2006.

 

Sin embargo, como jefe de Gobierno y potencial candidato presidencial, la primera decisión de López Obrador fue eliminar políticamente a Cárdenas. Sólo así se convirtió en candidato presidencial en 2006.

 

Vale el ejercicio memorioso porque Agustín Basave se podría convertir en figura decorativa de un PRD que, tras bambalinas, podría continuar bajo el control de “Los Chuchos”.

 

Por lo pronto la secretaria general del PRD, Beatriz Mojica, es la representación de “Los Chuchos” en la nueva dirigencia de los amarillos.

 

¿Qué va a pasar?

 

¿Basave cortará con “Los Chuchos?

 

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