Cuando se dio a conocer que el subsecretario de prevención del delito la SEGOB, Arturo Escobar y Vega, dejaba el cargo con motivo de una presunta orden de aprehensión que había girado la Fiscalía Especializada para la Atención de Delitos Electorales (Fepade) de la PGR, no imaginaría la dirigencia del Partido Verde Ecologista (PVEM), que no tardaría en llegarle un salvavidas.
Y es que a un par de semanas de haberse conocido este escándalo, es relanzado en una versión corregida y aumentada, en el que el PVEM quiere relacionar el pasado laboral del Fiscal de Delitos Electorales de la PGR, Santiago Nieto, con una actividad con el Grupo Parlamentario del Partido de la Revolución Democrática (PRD), para descalificar la investigación que por delitos electorales, tiene el verde en una serie de delitos, como la colocación de propaganda en lugares prohibidos, obsequio de boletos para funciones de cine, mensajes promocionales en salas cinematográficas, infomerciales de sus candidatos, mensajes por twitter de artistas y deportistas, entre otras muchas más faltas, una y otra vez, a lo largo y ancho de todo el país, sin el menor pudor, recato o vergüenza en apostarle a la ilegalidad.
Como es sabido, durante el Proceso Electoral Federal de junio pasado, hubo múltiples denuncias en contra del PVEM en el Consejo General del Instituto Nacional Electoral (INE), quien perdonó la serie de ilegalidades preelectorales, electorales y poselectorales, suficientes para retirarle el registro y cuando en un desafortunado comentario, el consejero presidente Lorenzo Córdova Vianello, dijo que con los actos de ese partido, “no puso en riesgo la democracia…”. Sin embargo, si consideramos a la democracia integrada al estado de derecho, el PVEM violó todo lo posible para obtener un beneficio, y por tanto, el razonamiento de Córdova Vianello es obsoleto y sin argumento, quien sale bien librado del escándalo Escobar, junto con el resto de sus cuestionados y parciales compañeros Consejeros, cuyas conductas se alejan de los principios rectores de la función electoral.
El escándalo más reciente de los deportistas lo protagonizó, Miguel Herrera El Piojo, ex director técnico de la selección mexicana de futbol, quien fue citado a declarar por la Sala Regional del TRIFE, por haber enviado un tuit el día de la jornada electoral, con un mensaje evidentemente político partidista a favor del PVEM.
Este país requiere de dotársele de credibilidad. Sus instituciones son vulneradas y la impunidad permanece rampante. Corrupción que vulnera desde las más altas esferas de este país hasta las más modestas oficinas federales.
La Casa Blanca, OHL, el tren México Querétaro, informes de organismos de la sociedad civil, que dan cuenta del estado de corrupción en que se encuentra tal o cual dependencia, y pareciera con un mínimo de voluntad para impedir la impunidad, y con algunos integrantes del Poder Legislativo que parecieran que están en un sexenal letargo, sin pena ni gloria.
Prosiguiendo, estas irregularidades le son atribuidas al PVEM y al ahora ex subsecretario Escobar, en las que unas 22 organizaciones civiles aplaudieron la salida de Escobar de la SEGOB, exigiendo que no regrese a su cargo. No sólo ello, si el Fiscal de Delitos Electorales cometió una ilegalidad, que la pague, como también debe pagar el PVEM y Escobar.
La democracia no sólo comprende los actos preparatorios y el de la jornada electoral, como algunos ignorantemente usan como argumento para desviar el tema. En su más amplia expresión compromete una serie de valores políticos, económicos y sociales, en un sistema cuyo campo social se encuentra vulnerado por la impunidad con el que se conducen personajes políticos que sin recato, menos vergüenza, cometen cualquier ilegalidad o delito, mientras tanto, celebremos que el pasado miércoles 9 de noviembre en el día internacional contra la corrupción, el juez 11 de distrito negó una orden de aprehensión en contra de Escobar.
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