En algún momento del día y de nuestra vida, todos los usuarios de la calle nos convertimos en peatones, al bajarnos del auto y caminar a la oficina, al tomar el camión, al ingresar a la estación del metro, previo tomar la bicicleta, etcétera.
El sector más vulnerable, es el de los niños, cuando llegan o salen de sus centros de estudio, y que en la mayoría de las ocasiones lo hacen solos al encontrarse cerca de su domicilio.
De acuerdo a información de Safe Kids México AC, en 2013 el 81% de escuelas públicas en la delegación Cuauhtémoc llegan caminando a los centros escolares, al 86.8% nunca les enseñaron por dónde cruzar, y al 75% desconocían que las calles pueden ser peligrosas.
Una de las primeras medidas, para reducir hechos de tránsito y atropellamientos a este grupo y otros considerados como vulnerables, se estableció en el Nuevo Reglamento de Tránsito de la Ciudad de México, normando zonas de tránsito calmado, donde los vehículos motorizados deben circular como máximo a 30 km/hr.
La Encuesta Intercensal 2015 que realizó el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), indica que el 54.9% de los mexicanos que acuden a un centro de estudio, lo hacen caminando y el 25.6% de ellos se trasladan en camión, combi o taxi.
Lo cierto es que más allá de las cifras, las víctimas por hechos de tránsito tienen rostro y nombre, no podemos permitir que niños y jóvenes sean el sector más vulnerable, según cifras de la Organización Mundial de la Salud, tengan como principal causa de muerte hechos de tránsito.
Otra de las medidas que se deben establecer, es a través de la Secretaría de Educación de la Ciudad de México, para que ésta pueda incluir en los programas de educación básica, una materia de seguridad vial.
El objetivo es que los niños desde pequeños, conozcan cómo deben atravesar la calle, las medidas adecuadas para caminar en la calle de forma segura, entre otras; con el propósito de que sean ellos quienes puedan romper el paradigma que se cuenta actualmente en la ciudad.
La responsabilidad de brindar seguridad a este sector es responsabilidad de todos, padres de familia deben poner el ejemplo, gobierno establecer condiciones para mejorar la seguridad vial y que impulsen una materia especializada.
Los esfuerzos deben ser de forma conjunta, de igual modo se podría tener una victoria a largo plazo, ciudadanos que entiendan y respeten normas que son necesarias para la convivencia, pero sobre todo para salvar vidas.