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Marcelo: Criminal o perseguido político

No es necesario iniciar una persecución política contra el señor Ebrard.

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Escrito en OPINIÓN el

Parece de risa loca. La versión empieza a pasar de la chabacanería a la “realidad cotidiana”.

 

Empieza a saltar de boca en boca. La versión dice que Marcelo Ebrard es un perseguido político.

 

Y quienes la echan a caminar, quienes dicen que Marcelo “es un perseguido político” argumentan que “todo el peso del Estado” –con todo lo que eso significa-, ha caído contra Marcelo Ebrard.

 

Más aún, dicen que se trata de “una venganza”. La razón, que Marcelo “sería el responsable” de divulgar la información de la llamada casa blanca de la familia presidencial.

 

Y, en efecto, sino es porque se trata de una versión locuaz, cualquiera pensaría que existe una persecución política contra Ebrard.

 

¿Por qué perseguir a Marcelo?

 

  1. Cualquier ciudadano con un mínimo de información sabe –o debiera saber-, que para iniciar un proceso penal contra el ex jefe de Gobierno; para poner en marcha una investigación sobre su responsabilidad en obras fallidas como la L-12 del Metro, no se requiere una persecución política.

 

  1. Tampoco se requiere perseguir políticamente a Marcelo Ebrard, para llegar a la conclusión de que hay tráfico de influencias, lavado de dinero y conflicto de interés en la casa que habita –o habitaba- el ex jefe de Gobierno en la colonia Roma.

 

  1. En este y en otros espacios dijimos, desde que terminó el gobierno de Marcelo Ebrard, que tarde o temprano pagaría el precio político o judicial por los graves errores cometidos.

 

  1. Más aun, cuando inició el escándalo de la Línea 12 dimos pistas de que no pasaría mucho tiempo para que se iniciara un procedimiento legal contra el ex jefe de Gobierno.

 

  1. Y las evidencias hoy están a la vista. La autoridad federal, por un lado inició una investigación por lavado de dinero y recursos de procedencia ilícita en contra de cercanos a Marcelo Ebrard.

 

A su vez, el Distrito Federal también inició una serie de averiguaciones por la presunta responsabilidad del jefe de Gobierno en la administración anterior en la fallida línea del Metro.

 

Más aun en su edición del martes 30 de junio de 2015, el diario La Razón documenta de manera puntual, que el gobierno del DF a través de la PGJDF tiene abiertas “34 averiguaciones” contra Marcelo Ebrard.

 

Queda claro que, con toda la anterior información, no es necesario iniciar una persecución política contra el señor Ebrard.

 

No, lo cierto es que el ex jefe de Gobierno es –en realidad-, responsable de distintas y diversas irregularidades en su gestión al frente de la capital del país.

 

Dicho de manera coloquial Marcelo no es un perseguido político –no hay razón para que lo sea-, sobre todo ante las evidencias -si es que se comprueban- de que pudiera ser tratado como un criminal.

 

Al tiempo

 

@RicardoAlemanMx