De acuerdo con la Ley General de Partidos Políticos de mayo de 2014 derivado de una serie de reformas a la Constitución Política Federal en materia político electoral, una de las nuevas disposiciones que se determinó para el proceso electoral del año en curso fue subir el umbral para que un partido político conservara su registro.
La legislación indica, entre otras disposiciones, que son causa de pérdida de registro de un partido político:
“No obtener en la elección ordinaria inmediata anterior, por lo menos el tres por ciento de la votación válida emitida en alguna de las elecciones para diputados, senadores o Presidente de los Estados Unidos Mexicanos, tratándose de partidos políticos nacionales, y de Gobernador, diputados a las legislaturas locales y ayuntamientos, así como de Jefe de Gobierno, diputados a la Asamblea legislativa y los titulares de los órganos político-administrativos de las demarcaciones territoriales del Distrito Federal, tratándose de un partido político local.”[1]
En este sentido, en los primeros días del mes de noviembre el Consejo General del Instituto Nacional Electoral (INE) en un largo debate aprobó por mayoría, la pérdida del registro nacional de los partidos del Trabajo (PT) y Humanista (PH), por no haber alcanzado el 3% de la votación emitida en las pasadas elecciones federales (que fueron para elegir a los diputados federales) que, dicho sea de paso, fue concurrente con 17 elecciones locales.
Sin embargo, justamente hace unas horas la Sala Superior del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación revocó la pérdida de registro del PT que en su oportunidad había aprobado el INE. Recordemos la polémica desatada sobre todo con la exigencia del PT de permitirle sumar los votos de la elección extraordinaria de Aguascalientes del Distrito Electoral I que tendrá verificativo este próximo domingo 6 de diciembre. Al final el Tribunal le dio la razón al PT y una vez más pone en cintura al INE.
La decisión del Tribunal permite al PT la posibilidad de que en la elección referida pudiese obtener el número necesario de votos para alcanzar su tan anhelado registro nacional.
En su momento y de acuerdo con el resultado del INE, tanto el PT como el PH perdieron su registro como partidos políticos nacionales, pero, a nivel local, es decir, del resultado de las elecciones que se registraron en alguna o algunas de las entidades federativas podrían seguir incursionando como partidos políticos locales si alcanzaron el 3% de la votación válida emitida.
Un ejemplo de ello lo tenemos en el Estado de México, en donde el Consejo General del órgano electoral local recientemente determinó aprobar el registro del PT como partido político local en tanto desechó la solicitud de registro por la misma vía del PH. La reciente resolución del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación lo cambia todo. Aquí habrá muchas reacciones y mucha historia aún por escribir.
Aquí hacemos dos consideraciones; por un lado, estos dos Institutos Políticos estaban preparándose para seguir incursionando por la vía local, que con lo determinado por el Tribunal ahora sólo el PH podría seguir esta vía.
En el caso del PH vale la pena preguntarnos: ¿Qué pasará con la militancia, las dirigencias, pero sobre todo los cuadros políticos que el Partido formó y forjó durante las contiendas electorales tanto federales como locales?
En toda democracia representativa como la nuestra, siempre es importante que los ciudadanos tengan un abanico importante de opciones políticas para que, en libertad, decidan libremente por su mejor opción política. Por ello, creo que cualquier Instituto político deberá hacer un balance de su planeación, desarrollo y operatividad en las pasadas elecciones y, si es su intención continuar en la escena política, reforzar aquellas metas que no alcanzaron a cubrir.
Por otro lado, también sería recomendable que otras fuerzas políticas pudieran dar cabida no sólo a la militancia, sino a integrar algunas propuestas, acciones e ideologías que al final cercano a un 3% de la población simpatizó con ellas. Ni que decir de cuadros políticos especializados que han generado una gran experiencia a lo largo de los años y de las contiendas electorales.
Justamente hace ya varios años conocí a Francisco Nava Manríquez militante activo de una fuerza política, hoy del PH, con quien coincidí en diversos ámbitos profesionales y políticos; cuadro político destacado y formado desde las bases, con amplia experiencia que al igual que otros emblemáticos políticos deben seguir la lucha social en favor de las diversas demandas de la población; justamente él me hizo reflexionar sobre lo que, independientemente de lo mandatado por la legislación electoral, o lo determinado por el INE que hoy sabemos se volvió a equivocar, detrás de la pérdida de registro de un partido político quedan gentes valiosas, trabajo realizado y anhelos.
Tanto a la militancia, dirigentes y simpatizantes del PH les deseo mucha suerte. Al PT en hora buena por creer en las Instituciones y cumplir con su compromiso constitucional de dar cause a sus controversias por las vías legales adecuadas e intituídas para ello. El escenario cerrado que se vislumbra para el 2018 seguramente dará la oportunidad de generar alianzas estratégicas que lleven a aglutinar a diversas fuerzas políticas tanto nacionales como locales.
[1] Artículo 94, fracción 1, inciso b), de la Ley General de Partidos Políticos.