No cabe duda que el gobierno federal se empezó a poner las pilas en lo que a banca de desarrollo se refiere y ya cubrieron las vacantes que desde hacía varias semanas estaban pendientes.
La última que se dio a conocer hace unos días fue la dirección general de Banobras, en donde llegó Alfredo Vara Alonso, quien fue secretario adjunto del Instituto para la Protección al Ahorro Bancario (IPAB) y quien también se le considera una de las personas de confianza del secretario de Hacienda, José Antonio Meade.
Los más cercanos al poder, aseguran que los ajustes continuarán en los siguientes meses, sobre todo en las políticas que se aplican para las entidades de fomento, a fin de que puedan apoyar el crecimiento de la planta productiva nacional.
El que dicen que quien ya no sabe si empacar o desempacar sus maletas es Agustín Carstens, quien en unos meses volará a Basilea, Suiza, para presidir el Banco Internacional de Pagos (BIS), sin embargo, en este tiempo de espera, hay analistas que no están muy de acuerdo con las medidas que aplica el Banco de México y ya anticipan que la inflación podría llegar a poco más de 7%, cifra muy por encima de la que se estimó en los Criterios Generales de Política Económica para 2017.
Pero no sólo la inflación podría estar lejos de los pronósticos de los especialistas, sino también el crecimiento económico. Incluso, hay preocupación entre los analistas internacionales, ya que aseguran que los indicadores de confianza en México presentaron un fuerte revés en diciembre y enero, ello ante la ya conocida incertidumbre respecto a las políticas que adopta la administración Trump.
Ya es una realidad que la confianza de las empresas cayó, luego de una serie de medidas que podrían impactar de manera negativa a la economía mexicana, tal es el caso de la posible renegociación de tratado de libre comercio con México y Canadá (NAFTA), las previsibles restricciones a los flujos migratorios y de remesas o los planes de reforma fiscal que podrían gravar las importaciones.
Los especialistas anticipan que si bien nos va, la economía crecerá 1% en este año y 1.8% durante 2018, frente al 2% que se registró el año pasado.
Incluso, ya aseguran que la incertidumbre proveniente de Estados Unidos afectará a la inversión, al tiempo que la depreciación del tipo de cambio y el consiguiente aumento de la inflación obligará al Banco de México a adoptar una política monetaria más restrictiva, con impacto negativo sobre el crecimiento.
De ahí que ante una situación nada favorable, el equipo del presidente Enrique Peña, tiene la encomienda de buscar al candidato idóneo para manejar el timón del Banco de México, bajo un escenario complicado.
Por lo pronto, el candidato del Jefe del Ejecutivo es Alejandro Díaz de León, actual subgobernador del Banxico, a quien nos dicen, ya se le está preparando el camino, mientras que el de muchos banqueros privados es Alejandro Werner, quien trabajó en Hacienda y en el mismo Instituto Central durante varios años, sin embargo, para que llegue Werner se tendrían que hacer cambios a la ley porque aunque tiene la nacionalidad mexicana, nació en Argentina.
Así las cosas…