LAS VEGAS, Nevada. Las máquinas serán capaces de hacer la mitad de los trabajos humanos en dos décadas, avizora Dan Schawbel, un joven que a sí mismo se presenta como representante de los millennials y vende miles de libros sobre las tendencias del empleo en Estados Unidos.
La anterior fue parte de una gran advertencia, tanto a empresas como a trabajadores, de los cambios acelerados que estamos viviendo y debemos reconocer, porque impactarán en nuestra vida tarde o temprano.
Lo que puede ser automatizado son los cajeros, los empleados bancarios por consiguiente no serán necesarios. Los recepcionistas y asistentes, los mensajeros de a pie que pueden ser sustituidos por drones, y los jóvenes del telemarketing también, maquinitas humanas que repiten frases hechas y que robots más amables pueden dejar sin aliento.
Éso significa para las empresas más eficiencia y menos costos de nómina, dice Schawbel a su audiencia reunida en el hotel Aria de Las Vegas.
Lo que significa para los empleados es menos horas de trabajo y menos salario. Más presión por producir, más temores de ser reemplazado, y más entrenamiento en horas libres si quieres sobrevivir.
“Habrá una gran diferencia entre comprar Gucci y otra marca barata”, suelta el consultor como consuelo. Sí, pero la verdad es que todos debemos pensar si una máquina puede hacer nuestro trabajo, pues si la respuesta es afirmativa, estamos en problemas.
A quién contratarías, desliza la pregunta ante empleados y directivos de empresas que asisten al Kronos Works 2015: ¿A Mike Smith, empleado temporal que cobra 15 dólares la hora y te cuesta 31,680 dólares al año, o a Robo Mike, que trabaja sin descansar 100 horas a la semana y te cuesta 25,000?
Más directo: ¿Contratas a un robot que no se queja, cobra menos y trabaja más, o a un humano con todos sus conflictos y peticiones que eso conlleva?
Schawbel hizo notar que McDonald´s en Europa instaló 7,000 computadoras con pantalla táctil para tomar órdenes, son capaces también de guardar datos de los clientes, preferencias en el menú y tendencias de compra, rastrean los inventarios y se ahorran el contacto humano con miles de jóvenes que ven a esta cadena de comida rápida como su puerta de entrada al mundo de los asalariados.
Chili´s, recuerda Schawbel, instaló 45,000 tablets que les permiten a los clientes pagar sus cuentas, jugar algún juego y ordenar. Adiós meseras y meseros y probablemente propinas.
Lowe´s, mientras tanto, está probando robots que saludan a los clientes y los dirigen al pasillo correcto según su perfil de compra.
¿A qué te dedicas?, pregunto yo.
“¿Cuántas veces has trabajado fuera de la oficina en la última semana?”, pregunta Dan Schawbel ante unas 300 personas. La mayoría levanta la mano frente al consultor y autor de bestsellers como Promote Yourself. Un poco menos fueron los que la alzan cuando pregunta cuántos habían llevado su teléfono de vacaciones… a pesar de ello, son muchos los que aceptan que viaja con ellos.
La flexibilidad del trabajo es el tema central de éste y el próximo año, avizora este millennial. Claro, pensamos, en las últimas semanas y meses hemos meditado acerca de ello.
Si tú crees que no importa dónde trabajas, cuántas horas seguidas lo haces o cuándo trabajas, coincides con el 69% de los estadunidenses que creen que ir a la oficina no es necesario para ser productivo. Workplace Flexibility es el tema que hoy los expertos en recursos humanos y expertos en tecnología para la administración de empleados están discutiendo. Las nuevas generaciones, y no tan nuevas, quieren romper con las cadenas de los jefes que necesitan ver a sus trabajadores sentados ocho horas frente a ellos para sentir un poquito de poder, el poder de mandar y decir que sus trabajadores bien trajeados producen más que los que andan corriendo en la calle y tal vez, realmente generando negocios.
Eso no es todo. Si te sientes muy cansado, agotado, coincides con 50% de los estadunidenses que se dicen overworked and burnt out. Esa es otra tendencia. Nos estamos fundiendo con tanta actividad continua y sin horarios.
El experto dijo que si hay flexibilidad en el trabajo, los empleados se vuelven más productivos, un 12 por ciento.
Un 63% dice que tener un jefe “remoto” es una mejor experiencia.
Lo cierto es que son tendencias y es parte de lo que están entendiendo los empleadores en Estados Unidos. Mientras eso sucede en este país, allá en México continuamos pensando que checar tarjeta implica llegar a las ocho e irse a las seis de la tarde. Comer una hora y ya. Cumplir un horario como en la primaria. Eso es su modelo de productividad. Lo bueno es que la tecnología está midiendo cada vez más quién trabaja y quién realmente produce ganancias a la empresa. Si tú crees que llegar a la oficina y ver pasar el tiempo sin hacer nada actualizando tu perfil en Facebook es trabajar, entonces también puedes ser sustituido por un robot. Espera a que se den cuenta de que no haces nada y finges ser uno más de esos uniformados que creen que cumplir horarios es productivo.
La tecnología wearable crecerá hasta representar un negocio de 80 mil millones de dólares para 2020, calcula Dan Schawbel. El socio y director de investigación de Future Workplace dice que eso hará, entre otras cosas, que los empleadores sepan con exactitud cuánto están trabajando sus empleados y los resultados que les ofrecen.
Lo anterior, reitero, no necesariamente sentados en una silla y un escritorio ocho horas al día. La verdad es que con los nuevos dispositivos se puede medir qué tantos resultados arrojas a la empresa y eso podría darte más libertad en un futuro cercano.
Los wearables, además de que crean una nueva relación con los trabajadores, les otorga el poder de acceder a las bases de datos, con lo que pueden resolver problemas más fácilmente.
BP impulsa a que sus empleados usen activity trackers, como Fitbit, para ofrecerles descuentos en sus seguros médicos.
Tesco le da arm bands o pulseras inteligentes a sus empleados, así los puede localizar y encargar tareas en específico, dependiendo de la zona en que se encuentran.
Por si fuera poco, Dan Schawbel dice que el espacio de los empleados en las oficinas se está encogiendo, un 60% de los empleados ya no usan sus espacios asignados y más gente trabaja remotamente. Esto le da ahorros a la compañía.
El millennial que le explica a los viejos cuáles son las tendencias de los espacios de trabajo y de los nuevos empleados habló de los Z, esa generación de humanos que nacieron entre 1994 y 2010, y que por lo tanto tendrán entre 6 y 22 años en 2016.
Lo que los hace diferentes es que es una generación más emprendedora, leal, flexible y realista. Y contra ellos, si eres millennial o viejo, simplemente tendrás también que competir por un lugar de trabajo.
Sus prioridades, dice Schawbel, son las oportunidades de crecimiento en la empresa y trabajar con balance, vida personal, calidad de vida y educación, además de un empleo bien remunerado.
Ellos, cuando piden empleo, se fijan en el seguro de gastos médicos, el entrenamiento y la flexibilidad de la empresa. Es decir, nuevos cambios comenzarán a notarse más claramente el próximo año. Y más, tomando en cuenta que los millennials comenzarán a ser padres y eso reconfigurará las prestaciones de todas las empresas. Por ejemplo, Netflix da permiso a las madres de ausentarse el tiempo que quieran durante el primer año en que nace su bebé. Adobe les da 26 semanas y Microsoft 20 semanas. Facebook, por lo pronto, ofrece a los papás 4 meses de incapacidad pagada cuando acaban de tener a sus hijos, y Yahoo! dos meses.
Dan Schawbel resume que el futuro del trabajo es un horario que no se limita a cumplir sentado de 9 a 5 de la tarde.
Todos seremos de alguna manera freelancers.
La elección de carrera se dará mucho antes de lo que actualmente conocemos.
Y todo será medido.
Si eres empleador, debes ofrecer una mejor oficina y ser más flexible con tus trabajadores si quieres retener el talento. Además de considerar las necesidades de las nuevas generaciones.
Si eres trabajador y consideras que un robot puede hacer lo que haces sentado en tu escritorio, deberías estar igual de preocupado que yo, pues dicen que las máquinas podrán sustituir a los reporteros de finanzas y experimentos avanzados en este campo ya se realizan.