"Sé que (abortar) es un drama existencial y moral. He encontrado a muchas mujeres que llevaban en su corazón una cicatriz por esa elección sufrida y dolorosa”: Papa Francisco.
Este martes 1 de septiembre se publicó en el Vaticano una carta del Papa Francisco ante la cercanía del Año de la Misericordia, que se inicia el martes 8 de diciembre de 2015 en la Solemnidad de la Inmaculada Concepción y concluirá el 20 de noviembre de 2016 en la Solemnidad de Cristo Rey.
La misiva está dirigida a Mons. Rino Fisichella, Presidente del Consejo Pontificio para la Promoción de la Nueva Evangelización y contiene indicaciones específicas sobre el perdón de pecados graves como el aborto, las indulgencias plenarias y otros temas de interés para todos los católicos.
De entrada es una buena noticia para muchas personas, sobre todo en el tema del aborto. Obviamente ninguna persona desea abortar. Son las circunstancias que obligan a que existan muchas personas pecadoras –mujeres, médicos, enfermeras, y hasta cónyuges y parejas ocasionales– los cuales sin darse cuenta han sido excomulgadas de forma automática (latae sententiae, es decir sin juicio eclesiástico).
El derecho canónico declara que "quien procura el aborto, si éste se produce, incurre en excomunión latae sententiae" (Canon 1398).
Esta pena se aplica a quien provoca un aborto, lo pide, lo aconseja, lo ejecuta, y a quien colabora; no cuando es espontáneo, involuntario.
Y la excomunión consiste en que no se pueden recibir los sacramentos ni otros servicios religiosos, sobre todo la confesión y comunión eucarística, si antes no reciben la absolución del pecado y la liberación de la pena, cosa que sólo puede hacer el obispo y algunos sacerdotes a quienes él faculta.
Debemos decir, que en los últimos años diversos obispos han concedido la facultad de perdonar esos pecados a todos los sacerdotes de sus diócesis en tiempos penitenciales como la Cuaresma, que sólo es de 40 días (inicia el miércoles de Ceniza y termina antes de la Misa de la Cena del Señor del Jueves Santo).
Esos son los días del perdón y de la reconciliación fraterna.
El cardenal Norberto Rivera Carrera, arzobispo Primado de la ciudad de México, ha emitido en los últimos años circulares señalando que en estas fechas sus sacerdotes podrán perdonar el pecado del aborto.
Obviamente estos temas son sólo muy importantes para quien llevan plenamente su religiosidad. Son como los llamados misa: ¡El que quiera va y el que no, no!
Pero la decisión del Papa es muy importante, por el mensaje de perdón que manda.
Me llamó la atención que el madrileño El País haya dedicado su editorial a la decisión papal.
“El aborto es una práctica legal —con más o menos restricciones— en la mayoría de los países del mundo. Que el representante de una religión decida variar un procedimiento que no tiene consecuencia legal alguna como es el perdón de los pecados puede parecer un tema secundario sin mayor trascendencia; pero en el caso de la Iglesia católica no es así. Se trata de una institución de un peso indudable en las discusiones que se han producido en numerosos países respecto a la legalización o modificación de las leyes relativas a la interrupción del embarazo. España, Irlanda, Polonia y Chile, por citar algunos casos, son buenos ejemplos”.
En efecto, Francisco decidió que todos los sacerdotes del mundo, “no obstante cualquier cuestión contraria”, estarán facultados para perdonar el pecado del aborto. Incluso la facultad se le da a los de la Fraternidad Sacerdotal San Pío X (FSSPX-lefebvristas).
Como vemos el Papa no excluye a nadie.
Eso sí, dice el Papa, que “los sacerdotes se deben preparar para esta gran tarea sabiendo conjugar palabras de genuina acogida con una reflexión que ayude a comprender el pecado cometido, e indicar un itinerario de conversión verdadera para llegar a acoger el auténtico y generoso perdón del Padre que todo lo renueva con su presencia”.
Para explicar su decisión, el Papa argentino afirma que “uno de los graves problemas de nuestro tiempo es, ciertamente, la modificación de la relación con la vida. Una mentalidad muy generalizada que ya ha provocado una pérdida de la debida sensibilidad personal y social hacia la acogida de una nueva vida”.
“Algunos viven el drama del aborto con una consciencia superficial, casi sin darse cuenta del gravísimo mal que comporta un acto de ese tipo”.
Francisco prosigue su reflexión y resalta que “muchos otros, en cambio, incluso viviendo ese momento como una derrota, consideran no tener otro camino por donde ir. Pienso, de forma especial, en todas las mujeres que han recurrido al aborto. Conozco bien los condicionamientos que las condujeron a esa decisión. Sé que es un drama existencial y moral”.
Y agrega: “He encontrado a muchas mujeres que llevaban en su corazón una cicatriz por esa elección sufrida y dolorosa. Lo sucedido es profundamente injusto; sin embargo, solo el hecho de comprenderlo en su verdad puede consentir no perder la esperanza”.
El jesuita precisa asimismo que “el perdón de Dios no se puede negar a todo el que se haya arrepentido, sobre todo cuando con corazón sincero se acerca al Sacramento de la Confesión para obtener la reconciliación con el Padre”.
Obviamente ha habido algunas reacciones.
El periódico Reforma recabó opiniones de varias personas que leyeron la carta papal, a saber:
"Valoramos los esfuerzos para lograr una Iglesia abierta. Sin embargo, seguir asociando el aborto con el pecado es algo que se debe superar", planteó María Consuelo Mejía, directora de Católicas por el Derecho a Decidir.
Para Regina Tamez, directora de Grupo de Información en Reproducción Elegida, la decisión del Papa es absurda, dijo que "la cuestión no es de perdón clerical, es un asunto de salud pública y justicia social. Se necesita servicios médicos".
Para Jorge Serrano Limón, dirigente de Provida en México, el aborto es “es gravísimo y es una de las pocas causales de excomunión, pero también es cierto que el Santo Padre quiere la reconciliación, quiere unir a aquellas personas que están totalmente apartadas de la Iglesia por este pecado".
Y agregó que le “parece maravilloso, ya que nadie quiere condenar a aquellos que se dedican a quitarle la vida a un ser humano en el vientre materno, nadie los quiere condenar, al contrario, todos queremos su conversión".
Para Mario Romo director de la Red Familia: "Lo que hace el Papa (Francisco) es un acto de pastoral de acercamiento con las personas necesitadas de la misericordia de Dios. No debe entenderse que el pecado del aborto es menos grave o que no fuera pecado".
"El Papa ha destapado cuál es su actitud frente al Sínodo donde se van a discutir otros temas ciertamente relacionados, como los divorciados vueltos a casar, nuevas formas de matrimonio, el tema de los homosexuales", dice Bernardo Barranco.
Andrew Chstnut, teólogo de la Universidad de Virgina opina que la carta del papa "consolida su reputación como un gran estratega en el esfuerzo para que católicos no practicantes regresen a la Iglesia".
Hay muchas reacciones más, sin duda.
Bergoglio parece decirnos que quien este libre de pecado que tire la primera piedra.
Lo positivo de la carta de Jorge Mario Bergoglio es que no revictimiza. Perdonará a todos y a todas, incluso a los políticos que han legislado en la materia. Claro que ese perdón podrá concretarse sólo del 8 de diciembre de 2015 hasta el 20 de noviembre de 2016.
¿Y después?
¿Y cómo obtener las indulgencias durante el Año de la Misericordia?
En su carta, el Papa explicó las formas en las que los fieles podrán obtener la indulgencia durante este jubileo; ya sea en Roma, en cualquier lugar del mundo e incluso en las cárceles.
Bergoglio también explica el modo en el que deben proceder los enfermos y ancianos para obtener esta gracia.
En cualquiera de los siguientes casos que se mencionan para obtener la indulgencia se debe cumplir primeramente con las condiciones habituales: confesión sacramental, comunión eucarística y oración por las intenciones del Papa.
- Los fieles “están llamados a realizar una breve peregrinación hacia la Puerta Santa, abierta en cada catedral o en las iglesias establecidas por el obispo diocesano y en las cuatro basílicas papales en Roma, como signo del deseo profundo de auténtica conversión”.
- “Igualmente dispongo que se pueda ganar la indulgencia en los santuarios donde se abra la Puerta de la Misericordia y en las iglesias que tradicionalmente se identifican como Jubilares. Es importante que este momento esté unido, ante todo, al Sacramento de la Reconciliación y a la celebración de la Santa Eucaristía con un reflexión sobre la misericordia”.
El Papa precisa que “será necesario acompañar estas celebraciones con la profesión de fe y con la oración por mí y por las intenciones que llevo en el corazón para el bien de la Iglesia y de todo el mundo”.
- Franciscoseñala también que cada vez que un fiel realice personalmente una o más las obras de misericordia corporales y espirituales “obtendrá ciertamente la indulgencia jubilar”.
“De aquí el compromiso a vivir de la misericordia para obtener la gracia del perdón completo y total por el poder del amor del Padre que no excluye a nadie. Será, por lo tanto, una indulgencia jubilar plena, fruto del acontecimiento mismo que se celebra y se vive con fe, esperanza y caridad”, resalta el jesuita.
- Sobre los enfermos y las personas ancianas que no pueden salir de casa, el Pontífice afirma que para ellos “será de gran ayuda vivir la enfermedad y el sufrimiento como experiencia de cercanía al Señor que en el misterio de su pasión, muerte y resurrección indica la vía maestra para dar sentido al dolor y a la soledad”.
“Vivir con fe y gozosa esperanza este momento de prueba, recibiendo la comunión o participando en la Santa Misa y en la oración comunitaria, también a través de los diversos medios de comunicación, será para ellos el modo de obtener la indulgencia jubilar”.
- Sobre los presos, el jesuita explica que “en las capillas de las cárceles podrán ganar la indulgencia, y cada vez que atraviesen la puerta de su celda, dirigiendo su pensamiento y la oración al Padre, pueda este gesto ser para ellos el paso de la Puerta Santa, porque la misericordia de Dios, capaz de convertir los corazones, es también capaz de convertir las rejas en experiencia de libertad”.
El problema es don Jorge Mario Bergoglio que no en todo el mundo hay capillas en las cárceles. En México hay poco menos de 400 Centros de Reinserción y, no sabemos si existen capillas, ni mucho menos capellanes.
- Indulgencia para los difuntos: “de igual modo que los recordamos en la celebración eucarística, también podemos, en el gran misterio de la comunión de los santos, rezar por ellos para que el rostro misericordioso del Padre los libere de todo residuo de culpa y pueda abrazarlos en la bienaventuranza que no tiene fin”.
Posdata
Inicio de la “histórica” LXIII Legislatura. Gracias al PRI llega Jesús Zambrano Grijalva (PRD) a presidir la Cámara de los Diputados en el primer año de ejercicio de la presente Legislatura. Creo que fue una excelente decisión. El de Sonora es integrante de la corriente de Los Jesuses, fue guerrillero de joven y es un excelente operador con quien fácilmente se pueden concretar acuerdos; Zambrano y su fórmula tuvo el aval de 444 legisladores; 12 votaron en contra y 32 legisladores se abstuvieron, por lo que llega con gran legitimidad.
Le ganó la carrera a los verdes, que días antes habían alzado la mano.
Pero los priístas pensaron que @Jesus_ZambranoG sería un gerente de ellos en San Lázaro. Se equivocaron.
Por eso, la joven diputada Yulma Rocha Aguilar (PRI) le tiro el primer jab para aflojarlo. Inició su postura con una queja y extrañamiento por las declaraciones criticas que emitió el presidente del Congreso al secretario de Gobernación al momento de recibir el III Informe de Gobierno.
La legisladora aseguró que sus comentarios fueron una postura partidista y con señalamientos personales que no representan al Pleno del Congreso: “Quien ve en la presidencia de la Mesa la oportunidad de una tribuna privilegiada para expresar su voluntad personal o partidaria, traiciona la confianza que le dimos todos, y también viola la ley”.
¡Órale!
¿Me preguntó y por qué mandaron a la joven diputada y no dio posicionamiento el líder César Camacho Quiroz?
Camacho dice que el capítulo está cerrado...
Mmm