A principios del siglo el fenómeno de la migración se multiplicó como consecuencia de conflictos armados, guerras civiles, pobreza, persecuciones, cambio climático o violaciones masivas de los derechos humanos. En este 2015, el conflicto migratorio se acrecentó a cifras que no se habían presentado en décadas, por ejemplo, en Europa se vive una situación solamente similar a la que se presentó con los refugiados de la Segunda Guerra Mundial.
Hasta septiembre de 2015, el número de migrantes que han cruzado el Mediterráneo, según la Organización Internacional para las Migraciones (OIM) es de 378 mil 343 personas, en su mayoría provenientes de Siria, Afganistán, Eritrea, Nigeria, Albania, Pakistán, Somalia, Irak, Sudán, Gambia y Bangladés, que han ingresado por esta ruta marítima a la Unión Europea. Asimismo, durante los primeros ocho meses de 2015, se reportó que 2 mil 760 personas perdieron la vida en naufragios en el mar Mediterráneo, lo que representa el 73% de las muertes a nivel mundial de migrantes en tránsito hacia su destino.
Por su parte, las proyecciones de la oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR), estimaron que la cantidad de migrantes que realizará la travesía por el mar Mediterráneo hasta Europa alcanzará los 400 mil a finales de 2015 y podrían llegar otros 450 mil o más en 2016, es decir, que en dos años, en esta región del mundo casi un millón de personas se verá forzada a abandonar su hogar.
Según la Organización de las Naciones Unidas (ONU), en la actualidad, existen a nivel mundial unos 232 millones de migrantes en búsqueda de nuevas oportunidades para mejorar su vida, desarrollar sus conocimientos y poner a salvo su integridad, de los cuales aproximadamente el 50% son mujeres. Por la inmensa cantidad de migrantes, la organización ha advertido que nos encontramos ante una crisis humanitaria sin precedentes.
Ante el aumento de los flujos migratorios en el mundo, la ONU proclamó el 18 de diciembre como el Día Internacional del Migrante, con la finalidad de que los gobiernos y organismos difundan información sobre los derechos humanos y libertades fundamentales de los migrantes.
En octubre de 2013, los Estados miembros de la ONU adoptaron por unanimidad una Declaración en la que reconocen la contribución importante de la migración al desarrollo y llaman a una cooperación más amplia para afrontar los retos de la migración irregular y facilitar un flujo de personas seguro, ordenado y regular.
En el documento también se enfatiza la necesidad de respetar los derechos humanos de los migrantes y de promover las normas internacionales de trabajo. Además, se condenan de manera firme las manifestaciones racistas e intolerantes y resalta la necesidad de mejorar la percepción pública sobre los migrantes y la migración.
“La persistente discriminación contra los migrantes genera grandes desigualdades, pone en peligro la trama de la sociedad y lleva con demasiada frecuencia a ataques violentos y mortíferos”, manifestó el Secretario General, Ban Ki-moon en su mensaje de este año.
Con respecto a México, en esta fecha tan representativa valdría la pena que el gobierno de nuestro país reflexionará sobre cuáles podrían ser las políticas a implementar, para evitar que se sigan dando las condiciones que obligan a millones de mexicanos a migrar como única alternativa de bienestar para ellos y sus familias.
Históricamente, México es el país que más inmigrantes ha aportado a los Estados Unidos de América, según datos del Pew Hispanic Center, 34.6 millones de personas de origen mexicano residían en dicha nación en 2014, de los cuales casi 12 millones no contaban con documentos. Para la mayoría de las personas migrantes es difícil y doloroso separarse de sus comunidades y su familia, pero lo es aún más cuando se enfrentan a dificultades económicas y sociales, discriminación y diversas violaciones a sus derechos en ambos lados de la frontera.
A pesar de estas adversidades, las personas migrantes contribuyen enormemente a sus comunidades de origen y destino. Tan sólo en el 2014, México captó 23 mil 606 millones de dólares en remesas posicionándolo como el tercer país receptor de remesas en el mundo. Y la cifra aumentó para este 2015, pues en los primeros diez meses del año, las remesas familiares alcanzaron la mayor acumulación en siete años, al completar entradas por 20 mil 700 millones de dólares, según cifras del Banco de México.
Como señala la Declaración de la ONU, los migrantes contribuyen al desarrollo económico, social, cultural… de los Estados receptores, esto último, fue reconocido por el propio presidente Barack Obama, quien estuvo presente en una ceremonia de naturalización de inmigrantes, a quienes elogió como gente honrada que le traen beneficios a su país.
simon@inprincipioeratverbum.com.mx
Linkedin: simón-vargas-aguilar
www.inprincipioeratverbum.com.mx
*Si deseas recibir mis columnas en tu correo electrónico, te puedes suscribir a mi lista en el siguiente vínculo: http://eepurl.com/Ufj3n