Main logo

Cine y tolerancia

El hecho de que este festival crezca cada año indica que tenemos sed de conocer otras realidades y profundizar más allá de los estereotipos.

Por
Escrito en OPINIÓN el

El aún fresco ataque en contra del semanario satírico francés Charlie Hebdo y el aparente ataque hacker de Corea del Norte en contra de los sistemas de Sony por una película que supuestamente los ofendía obliga a todos los artistas, creadores y personas interesadas en la libertad de expresión a replantearnos nuestro papel, sobre todo, a no ceder ante presiones en contra de las libertades básicas.

 

El cine por su misma naturaleza desafía esa forma de concebir al mundo en donde nada se puede cuestionar. La exploración de la vida y la sociedad lleva a directores, guionistas, productores y actores a cuestionar todas las facetas de la vida, a incomodar, a ser iconoclastas permanentes que cuestionan con humor, drama o investigación toda norma supuestamente intocable.

 

Cuando ha ocurrido que una forma de pensar, política o religiosamente intolerante, se encumbra en el poder el cine, y muchas coas más, dejan de funcionar de manera real. Se hacen películas llenas de mensaje preestablecidos y que no exploran las facetas oscuras de la personalidad humana o de la historia, sin historietas que caben dentro de los discursos dictados desde el poder. Y es deber de los cineastas no permitirlo.

 

Por estas razones me complació de forma particular que esta semana iniciará el 12º Festival Internacional de Cine Judío en México (FICJM), un espacio cultural que se encuentra enmarcado dentro de una tradición cultural especifica pero muestra gran flexibilidad en la elección de su selección oficial y las temáticas que cada una presenta. En otras palabras da cabida a la tan necesaria libertad de expresión.

 

 

En mi caso las  películas que más me interesan de este festival las constituyen A Film Unfinished (Hersonski, 2010), Zaytoun (Riklis, 2010) y My Awkward Sexual Adventure (Garrity, 2012) ya que muestran que un festival tan específico se puede hacer gala de una apertura  permanente a diversos discursos y temáticas sin detenerse en su misión durante estos tiempos de amenazas y e intolerancia.

 

 

Y es que uno podría pensar, metido en esos enemigos de la libertad que son los estereotipos, que un festival de Cine Judío sólo podría abordar temáticas del holocausto o sobre las persecuciones que han sufrido a lo largo de tantos siglos por ser una minoría en muchas partes del mundo. Por fortuna no es así y a que a pesar de que existe una innegable dosis del Holocausto no se presenta con un planteamiento de victimización sino de revisión histórica y exploración de esa realidad para aprender lecciones de lo ocurrido.

 

Es el caso de las dos primeras películas que les menciono.

 

Film Unfinished nos presenta un caso de manipulación histórica a través del cine de propaganda Nazi, lo cual nos debe poner en guardia ante las verdades aceptadas incuestionablemente y  Zaytoun nos muestra que no importa lo profundo de la enemistad aparente, siempre se puede ver más allá y encontrar una ventana de humanidad y tolerancia entre las personas.

 

En el caso de la última película que seleccioné me motivó que la temática inspira a censores y moralinos a torcer sus castas bocas: Un chico que por amor decide incursionar en el mundo de las fantasías sexuales, los strippers, y demás parafernalia que cuestiona los cánones de la sexualidad conservadora.

 

Quizá a usted, querido lector, le parezca que exagero al comparar este festival con un ataque terrorista, pero la verdad es que en el fondo se encuentra íntimamente ligada nuestra libertad de expresión con eventos como este. El hecho de que este festival crezca cada año indica que tenemos sed de conocer otras realidades y profundizar más allá de los estereotipos y ahí es donde la libertad de expresión inicia. En el conocimiento y la amplitud de horizontes.

 

Vayamos al cine, a todos los festivales temáticos y étnicos que podamos, así alimentamos en parte a nuestra libertad.

 

Final Cut

Normalmente este espacio se dedica a temas aparte del resto de la columna pero hoy sirve para que nuestros lectores puedan gozar de una función gratuita de una de las películas de la selección oficial del FICJM en el Autocinema Coyote.

 

 

La mecánica para ganar uno de los tres pases disponibles (cada uno válido para un coche) es la siguiente: Los tres primeros en enviar un correo  a michelle.lelis@lasillarota.com con sus datos completos y los nombres y directores de los ganadores del festival de cortometraje del FICJM 2015 se harán acreedores a el pase para ver  My Awkward Sexual Adventure en la función del próximo sábado 24 de enero a las 19 horas.

 

¡Suerte!

 

@HigueraB

eduardohiguerabonfil@gmail.com