Joaquín El Chapo Guzmán declaró ante el juez tercero de distrito el pasado 15 de febrero, ahí aprovechó para denunciar que es víctima de tortura y malos tratos, al tiempo que informó que padece problemas de salud debido a que no lo dejan dormir desde que fue internado en el penal de El Altiplano, tras su recaptura.
En la declaración obtenida por Radio Fórmula, el líder del Cártel de Sinaloa señala: “me doy por enterado de lo antes informado, asimismo quiero agregar que el 8 de febrero cumplo un mes en este lugar y hasta el día de hoy traigo problemas de salud por la razón de que casi no duermo porque en el día paso lista cada hora y en la noche cada cuatro horas. Traigo la presión alta y me doy cuenta porque me la checan diario y estoy tomando medicamento en la mañana, a mediodía y en la noche. El problema es porque casi no duermo por la razón ya comentada”.
Resaltó que desde su retorno al penal del que se fugó en 2015, no ha podido tomar el sol ya que lo han mantenido en su celda todo el tiempo, excepto cuando tiene notificaciones del juzgado.
Indicó que sólo ha tenido quince minutos de visita de su hermana Almira y de su esposa Emma Coronel, mientras que con su abogado pudo conversar tan solo media hora.
“No entiendo por qué la actitud de quien está llevando esta práctica de estarme torturando y no dejarme dormir. Hago responsable por mi vida a quien o quienes están llevando a cabo esta práctica hacia mi persona”, indicó en otra parte de su declaración.
“Por otro lado, me pasan lista ante una cámara, cuento hasta cinco y ya me dan por pasada la lista. Manifiesto que yo nunca había sufrido de presión, que se me hubiera subido hasta 190 y 100, por esta razón me duele la cabeza y los oídos y me siento sonámbulo. Me dan medicamento en la mañana, a mediodía y en la noche, pero el problema no es el medicamento, el problema es que no me dejan dormir, dejándome dormir no ocupo medicamento, no me dolería la cabeza ni los oídos”, detalló.
“He estado comiendo poco por lo mismo casi no me da hambre porque como lo he manifestado no deja de dolerme la cabeza y los oídos y me siento mal de todo el cuerpo, desequilibrado, porque tengo más de un mes que llevo a cabo el pase de lista en las horas mencionadas desde que llegue a este lugar”, agregó.
“Hace medio año que yo estaba en este lugar tenía visita por parte de los defensores en locutorio, diario, hora y media, de visita familiar cada nueve días cuatro horas y de visita íntima cada nueve días cuatro horas, una hora de patio de salir caminar al sol y aclaro que este trato actualmente lo tienen todos los internos, nada más yo no lo tengo y aclaro que no he tenido visita por parte de derechos humanos”, concluyó.
Tomada de Radio Fórmula
lrc