Tras pasar la noche en una cárcel militar, el ex presidente de Guatemala, Otto Pérez Molina, ya se encuentra en tribunales desde donde comparecerá por segundo día ante el juez Miguel Ángel Gálvez, dentro del proceso judicial que se sigue en su contra por un escándalo de corrupción que se conoce como “La Línea”.
El juez decidió ayer enviar al ex mandatario al cuartel de Matamoros, en la capital guatemalteca, con el objetivo de prevenir una posible fuga y garantizar su seguridad durante el proceso.
Según el mismo ex presidente, este viernes presentará su versión de los hechos que se desencadenaron con la detención de la ex vicepresidenta Roxana Baldetti.
Tras la audiencia de ayer, Otto Pérez comentó: “lo que hoy escuché (…) me parece inconsistente, mañana tendremos la oportunidad de aclarar, sólo hay escuchas y no sé investigo después qué pasó”.
Negó que tenga la intención de huir o pedir asilo político a otro país.
En la audiencia, la Comisión Internacional contra la Impunidad en Guatemala y el Ministerio Público presentaron más de 30 escuchas telefónicas en las que se explica el modus operandi de la estructura de defraudación aduanera.
lrc