Viajar en tren ligero y Metro en las mañanas para Juanita Hernández es toda una aventura. Sin embargo, desde el martes que hay contingencia ambiental se ha vuelto una tarea casi imposible y “peligrosa”.
“Estos días ha estado horrible, si se siente mucho más gente y aunque las mujeres vamos separadas, yo las he sentido más agresivas. Hay más empujones. Si de por sí el tren ligero cada vez está más lleno. Ahora con esto (de las contingencias), se pone peor. Hoy tuve que dejar pasar cuatro trenes, normalmente me subo al segundo”.
Comenta que la terminal de Tasqueña es un mar de gente. En los pasillos es complicado caminar, todo se “alenta” y además el calor es insoportable en las instalaciones del Metro.
“El martes vi como unas mujeres ya se iban a pelear porque la otra casi estaba encima de la otra, pero tampoco ni se podían pelear bien, porque estaba bien lleno”.
Hernández se traslada todos los martes y jueves al Centro de la ciudad. Realiza el aseo en un departamento. Ella vive en Milpa Alta, por lo que dice, no está acostumbrada a viajar con “tanta gente” en horas pico .
El pasado 15 de mayo, la Comisión Ambiental de la Megalópolis (CaMe) declaró la Fase 1 de contingencia en la Ciudad de México y desde entonces se mantiene. Como parte de las medidas se aplicó el doble Hoy No Circula, por lo que dejaron de circular cerca de 1.5 millones de automóviles.
Este tema de las contingencias ambientales provocan caos, desbordan los servicios de transporte que no tienen una capacidad para trasladar y ponen en complicación a toda la gente que no tiene la cultura de moverse de otra forma, reconoció Jesús Padilla, presidente de la Asociación Mexicana de Transporte y Movilidad.
Comenta que durante contingencias aumenta entre un 4 y 5 por ciento, es decir hay 60 mil pasajeros más en todo el sistema de Metrobús.
“Lo que nos revienta son las horas pico, después sobrevivimos. En las horas pico no hay un transporte que no tenga capacidad ni en Suiza”.
Para Alberto Acosta, quien tuvo que viajar en la Línea 1 del Metro, porque no circuló su auto, este jueves vivió un “infierno”.
“Eran las 9 de la mañana y en Pino Suarez, se subieron un montón de hombres, sentía codos por todos lados y un olor que para que te cuento. Además el calor, todo eso fue un infierno”.
Cuenta que se bajó en Balderas todo sudado. La ropa se le pegó al cuerpo. “Me tuve que esperar a que me secara. Todavía tengo que tomar un camión que me deja en Constituyentes, a ver cómo me va”.
La contingencia ambiental continuará todavía este viernes 19 de mayo por los altos niveles de contaminación registrados en el Valle de México, informó la CaMe.