OAXACA (La Silla Rota).- Mujeres indígenas de San Pedro y San Pablo Ayutla, Mixes, denunciaron la invasión de mas de 150 hectáreas de terrenos comunales, donde se ubica el manantial que los abastece de agua, así como la destrucción de viviendas, agresiones y retención de personas por parte de sus vecinos de Tamazulápam encabezados pos su autoridades municipales.
El pasado 18 de mayo, habitantes de Tamazulápam iniciaron el despojo, ingresaron con maquinaria pesada y destruyeron 13 viviendas afectando a 20 familias, así como pusieron bajo resguardo el manantial de agua, la principal fuente de abastecimiento.
La suplente de síndica municipal, Gloria Martínez Villanueva, sostuvo que hay 3 familias secuestradas, las cuales no pudieron salir durante la invasión y se encuentran retenidas.
Además hubo ecocidio y daños al medio ambiente, pues la zona que tomaron por la fuerza es de bosque. Derivado de este conflicto, cuya disputa principal es el agua, los pobladores de Ayutla iniciaron un bloqueo en la carretera de acceso, por lo que se presentaron funcionarios de la Secretaría General de Gobierno con quienes dialogaron y accedieron a desbloquear a cambio de que desalojaran a los invasores y liberaran el manantial, pero incumplieron.
"Al gobierno le gusta lidiar con los hijos rebeldes y desobedientes, no le importa lo que sucede con el resto".
Dijo que son un pueblo pacífico y han esperado pacientes la intervención del gobierno para evitar el derramamiento de sangre, " queremos soluciones por la via pacífica pero si no hay voluntad y no se llegan a buenos acuerdos vamos a tomar otras medidas".
Las mujeres hicieron responsables de lo que pueda suceder en adelante al gobierno y a pobladores de Tamazulápam, por ahora hemos sido tolerantes y cuidadosos de no tomar las armas porque somos pacíficos, pero no estamos dispuestos a tolerar más atropellos.
Las indígenas mencionaron que la concesión para extraer agua del manantial la tienen Ayutla y fue otorgada por a Comisión Nacional del Agua.
Mientras que interpusieron una demanda ante las autoridades competentes y solicitaron la intervención del gobernador Alejandro Murat Hinojosa para atender el conflicto que padecen.