MONTERREY, Nuevo León (La Silla Rota).- Hasta por tres mil millones de pesos podría ser el faltante en la Sección 50 del SNTE, durante la administración de Guadalupe Castillo García, ya que en los más de cuatro años que estuvo al frente de la organización magisterial no entregó ni un solo reporte financiero.
Castillo García, que entregó hace semanas la dirigencia sindical, dejó un pasivo de al menos 250 millones de pesos, a pesar de que esta dirigencia no hizo obra significativa alguna, y por el contrario, los servicios médicos decrecieron en calidad significativamente.
Además se añade el desabasto de medicamentos en los centros médicos, provocado por una deuda con proveedores.
De acuerdo a una denuncia por el maestro José Alonso Carrillo, hay desabasto de medicamentos y un adeudo superior a los 150 millones de pesos a proveedores.
Entre la serie de irregularidades detectadas en la Sección 50 del SNTE se encuentra el fraude del seguro mutualista que dejó desamparados a más de 200 agremiados que no pudieron cobrar servicios funerarios. Castillo, se encuentra actualmente vinculado a proceso por estos hechos.
Otra de las anomalías es el supuesto cobro vía nómina, de compras fantasma en tiendas o centros comerciales.
En el último reporte financiero existente de la Sección 50, correspondiente a septiembre de 2012, especifica que el pasivo final dejado por la anterior gestión es de cero pesos. Además, trascendió en el gremio que la gestión anterior (2008-2012) de Mirna Saldívar, quedó un excedente de 120 millones de pesos.
De esta cifra, 40 millones de pesos corresponden a un superávit en las finanzas internas y 80 millones de pesos derivado de un incentivo llamado “déficit médico”, premio otorgado por el Isssteleón por el cumplimiento puntual en la entrega de informes de gestión.
De esta forma, se deduce que Castillo García no sólo endeudó al SNTE con 250 millones de pesos, sino que se deshizo de otros 120 millones.
kach